Vicentin
Vicentin y la fábrica de zapatos que nunca existió
Por Bernardo Basombrío
El caso Olzen. Una sociedad utilizada bajo presunto robo de identidad para atacar a Vicentín y perseguir a sus ex directivos.

"Olzen industria y comercio de calzados S.A.", con domicilio en un "5to piso, oficina 3", de la peatonal Córdoba en el microcentro de Rosario, designó presidente de directorio a un brasileño de nombre Joel Isaías Da Costa, quien niega la relación, los cargos y las acciones en todo lo concerniente al Concurso y a las causas penales que involucran a Vicentin.

A principios del 2020 cuando la cerealera ya había declarado su estrés financiero, formalizó su presentación a Concurso de acreedores. La firma Olzen entró en escena y, para ello, se hizo titular de una deuda de $ 5.900.000.- pagando solamente $ 10.000.-. El requisito se obtuvo mediante la cesión del crédito que otra empresa -genuina acreedora de Vicentin- Garagro S.A., de El trébol, al sur de Santa Fe, le otorgó. El suceso concitó mucha atención por esta particularidad.

El brasileño, Joel da Costa supuestamente dio poder formal, por primera vez, al abogado Sebastián Farina para que éste lo represente ante el juzgado Civil y Comercial de Reconquista para verificar el crédito. Una vez admitido, el letrado pidió la nulidad de la apertura del Concurso a Vicentín, increíblemente. El magistrado Fabián Lorenzini la rechazó "in limine", es decir lo hizo ni bien acusó la solicitud por considerar que no procedía.

Presuntamente Da Costa, luego, otorgó poder en segunda oportunidad y ante la misma escribana, Virginia Gatti, y en favor de titulares e integrantes del estudio de abogados rosarino: los socios Guillermo Casanova, Jorge Mattos, Leandro Salvatierra y Diego Feser, extendido -entre otros miembros- a Viviana Cosentino y Patricio Longo, con la facultad general de designar a nuevos delegados.

Inmediatamente, Longo, abogado junior del estudio, presentó en la Justicia un pedido de beneficiar a Olzen para litigar sin el pago de sellos ni Costas; algo así como una carta de pobreza.

Mientras tanto, la zapatera libraba cheques sin fondos por $ 41.577.255.- a agosto de 2020, y Da Costa se endeudó con el HSBC a título personal, por lo que figura como moroso incobrable, actualmente.

Adicionalmente, en la web de AFIP no es posible obtener la constancia de la CUIT de Olzen, simplemente porque cuando un contribuyente no tiene las presentaciones al día, el organismo recaudador traba las solicitudes impidiendo el normal desenvolvimiento comercial.

Al consultar en el sitio del organismo se lee: "La CUIT del contribuyente fue limitada en términos de la RG AFIP 3832/16. El contribuyente cuenta con impuestos con baja de oficio por Decreto 1293/98".

Con todo esto, en junio de 2022 tomaba estado público que la cerealera alcanzaba la mayoría en cápitas y capital financiero requeridos por la Ley de Concursos y Quiebras para solicitar la homologación, una instancia crucial de orden. La propuesta de pago, con el visto bueno del juez, decía desprenderse de acciones de Renova y bienes en otras empresas para afrontar la deuda.

Previamente a avanzar con el Concurso y la propuesta, la justicia penal rosarina dictó una cautelar, entrometiéndose en la competencia del fuero Civil y Comercial, por lo que técnicamente no se podría consumar el acuerdo. De todas maneras y prolijamente, Vicentín hizo saber que el planteo y la viabilidad siempre requería se levante tal medida.

Ante la inminencia del logro, reiteran el uso de Olzen como punta de lanza embistiendo contra Vicentín. Para la ocasión se presentó como apoderado de la demanda el abogado Gustavo Feldman, comisionado al acto de parte del estudio Casanova. De esta manera, denunció ante la Justicia Penal por desobediencia a Omar Scarel -titular de la cerealera- alegando que la venta de acciones estaba consumada, en referencia a la propuesta concursal.

Los fiscales en lo penal económico Miguel Moreno y Sebastián Narvaja tomaron la referida acusación y procedieron a detener al presidente de Vicentín, Omar Scarel, en la madrugada del 6 de junio de 2022, a pesar de estar sujeto a derecho, conforme lo establece la Justicia. Actualmente, ese planteo está archivado.

En una entrevista, Joel Isaías Da Costa, presidente de esta particular sociedad, se desentendió de toda esta actividad y sostiene que no tiene nada que ver con Vicentín, ni la conoce. Esto, coloca en posición de gravedad jurídica todo lo actuado por Olzen, a través del estudio Casanova y de su junior, Longo, como así también por intermedio de los letrados Feldman y Farina, con quienes también niega relación alguna.

A través del armado de Olzen, una fábrica de zapatos inexistente, y bajo presunto robo de identidad a un desconocido brasileño, sistemáticamente se atacó el normal desenvolvimiento concursal y persiguió a los ex directivos de Vicentín.

Se utilizó una supuesta representación, sin que esta actividad sea conocida por el titular y con tal de malograr la suerte de Vicentín, para allanar el camino a quedársela. Todo, en un ecosistema judicial rosarino especialmente receptivo a esas formas y que siempre ha dado oídos preferenciales a esos actores, que habrían actuado invocando un poder que no tenían.

Publicar un comentario
Para enviar su comentario debe confirmar que ha leido y aceptado el reglamento de terminos y condiciones de LPO
Comentarios
Los comentarios publicados son de exclusiva responsabilidad de sus autores y las consecuencias derivadas de ellas pueden ser pasibles de las sanciones legales que correspondan. Aquel usuario que incluya en sus mensajes algun comentario violatorio del reglamento de terminos y condiciones será eliminado e inhabilitado para volver a comentar.
  • 2
    jorgeros
    22/02/24
    18:30
    Con la nuestra y la complicidad de Macri.
    Responder
  • 1
    tito5056
    22/02/24
    11:02
    ESTA NOVELA DEMUESTRA QUE LA "CASTA" LA CONFORMAN ABOGADO, JUECES, FISCALES, DENUNCIANTES APOCRIFOS Y DEMAS DEUDOS EN CONCURSOS INVENTADOS O QUE SE INICIAN Y DESVIRTUAN DE INMEDIATO, LA BOMBA TIENE QUE SER ATOMICA
    Responder