Dólar

Debate: ¿La devaluación de Prat Gay se quedó corta?

En el mercado se habla de un dólar atrasado. Economistas analizan qué falló en la devaluación de Prat Gay.

El régimen de flotación cambiaria administrada anunciado por elgobierno hasta ahora solo ha sido de flotación sin administración. Lasexpectativas de los exportadores no se vieron satisfechas hasta la fecha y poreso no cumplieron con el compromiso de liquidación de divisas acordado con elgobierno para diciembre y siguen con la misma política de conservar stocks yexportar solo en la medida en que necesiten cancelar compromisos.

Los importadores hasta el momento tampoco se hicieron sentir confuerza. La medida de shock del gobierno de aprobar la totalidad de las cerca de5 mil declaraciones juradas adelantadas por importaciones (DJAIs) pendientes almomento del levantamiento del cepo no generó el incremento de la demanda dedólares esperado. En primer lugar porque muchas DJAIs eran "mellizas oduplicadas porque a veces te las aprobaban y a veces no y muchos importadoreslas repetían para probar suerte y se han anulado" explica el ingenieroMiguel Ponce, director del Centro de Estudios para el Comercio Exterior delSiglo XXI.

Además, muchos de los importadores quedaron stockeados por 2 o 3meses a $9,70 y no se agolparon para entrar en el mercado. Y finalmente,"se enfrío la demanda de importación porque el 80 por ciento de lo que setrae se lo importa para exportación y nuestro principal socio comercial,Brasil, está en una crisis con récord de desempleo" señala elespecialista. El FMI publicó esta semana que la economía brasileña se contrajo3,8% y anticipa una caída de otro 3,5% de su PBI.

El difícil arte de flotar

La flotación cambiaria libre proclamada por los partidarios delcambio, hasta ahora no trajo el comportamiento esperado de los actores realesde la economía. Por el contrario, los mecanismos que generaron una salidatranquila del cepo son los mismos que mantuvieron hasta hoy el dólar más cercade los $13 que de los esperados $15.

El gobierno apuntaba a un dólar alto para mantener lacompetitividad y para hacer creíble la devaluación y eliminar por un buen ratocualquier nueva expectativa devaluatoria. No ocurrió y en el marcado ya hablande una nueva devaluación con un dólar ubicado entre 15 y 16 pesos en uno o dosmeses.

El ex secretario de Finanzas Guillermo Nielsen, ya había expresadoa principio de este año sus reparos: “No sé por qué las autoridadesdejaron este dólar tan bajo, quizás fue por los contratos a futuro” y había explicado que el dólar en este nivel“no se puede sostener” porque una vez que se incorporaran los importadores almercado, el precio iba a subir.

El ex secretario de Finanzas Guillermo Nielsen había advertido: No sé porqué las autoridades dejaron el dólar tan bajo.

Por eso los exportadores no están liquidando y operadores decambio opinan que al mercado le falta profundidad. "Se vio 70% más devolumen, pero aun falta. Hoy los exportadores liquidan más por necesidad queporque les guste el precio", dijeron desde ABC Mercado de Cambios a LPO.Los que pueden retener granos, los conservan. La tasa de interés en pesoscercana 27% no les compensa vender a menos de $13,70 y menos si esperan que enjulio el dólar llegue a $15 como ya indica el mercado de dólar a futuro.

Macri y Massa en un desayuno con empresarios en Davos.

Por eso, en estos días en los que la demanda se hizo más fuerteque la oferta, gradualmente la oferta fue convalidando la suba de la divisa yse triplicó el volumen respecto de la cantidad de operaciones spot que se veían a fin de mespasado. El dólar mayorista sumó 33 centavos a $13,73 en las tres primerassemanas de enero y lo seguirá haciendo en la medida en que siga ingresandodemanda por importación. "Los importadores siguen con el cupo que se subióde 2 a 4,5 millones de dólares mensuales de operaciones libres", recordóun operador.

Aun así las expectativas inflacionarias y devaluatorias no se apaciguaron.Orlando Ferreres publicó que sus pronósticos hablan de un dólar a más de $17para fin de año. Miguel Bein, con mayor moderación anticipó que la divisacerraría diciembre en $15,50.

El problema es que las inversiones que Macri buscó atraer en supaso por Davos, ya habían optado por postergar sus decisiones de inversiónhasta después de la devaluación para evitar que se depreciaran junto con lamoneda. Y mientras siga la expectativa de una nueva corrección del tipo de cambio, muchas seguirán en espera.

Analistas de Wall Street que estas semana estuvieron en Buenos Aires con más de diez fondos de inversión, reconocen: El dólar en uno o dos meses se mueve a 15 o 16 pesos.

Analistas de inversión de Wall Street que esta semana estuvieronen el país con más de diez fondos de inversión interesados en conocer deprimera mano las oportunidades que ofrece el cambio político en Argentina,reconocieron a LPO: "El gobierno se quedó corto con la devaluación. A mástardar en dos meses el dólar se va a ir a $15, $16 o incluso un poco más".

Por el lado de recuperar competitividad de la economía, ladevaluación de Prat Gay tampoco parece haber sido efectiva. "Lacompetitividad no es una variable que dependa únicamente del tipo de cambio,pero si vamos a analizar solo el tema cambiario, pues sí se quedaron mediocortos", reconoció el ingeniero Ponce.

Pero la competitividad también depende de la articulación de lascadenas de valor, de la infraestructura, de la cuestión impositiva. Porejemplo, "casi la mitad del costo de la producción de Córdoba es costo detransporte hasta el puerto", explicó Ponce.

En ese sentido, el especialista de Siglo XXI opinó que dada laurgencia con la que se salió del cepo, "no puede ser que la Agencia dePromoción del Comercio Exterior no esté funcionando a pleno con programasespecíficos para cada economía regional y cadena de valor; no basta con haberquitado las retenciones, lo cual es bueno, hay que pulir otrascuestiones".

El anuncio de el secretario del Tesoro de los Estados Unidos,Jack Lew, sobre el cambio de política de Estados Unidos de dejar de oponersesistemáticamente a los proyectos de inversión de los bancos multilaterales dedesarrollo es una buena noticia en este respecto. Permite mejoras eninfraestructura con créditos baratos de largo plazo.

El impacto inflacionario

El otro problema es que, mientras pasan los días, lacompetitividad ganada con la devaluación empieza a licuarse por laaceleración de la inflación. El ex presidente del Banco Central y referente delFrente Renovador, Aldo Pignanelli, advirtió que la inflación delprimer bimestre del año acumularía una suba de 8%. “Con una base tan alta en elprimer bimestre es difícil llegar al 20% anual, y si bien el gobiernoapuesta a una caída en el segundo semestre, todavía faltan las paritarias”,adviertió en diálogo con LPO.

Pignanelli remarcó que “el gobierno está intentando salir delbrete donde está el país, pero no está siendo ayudado por el contextointernacional” y advirtió que “si la devaluación se va a precios internosestá fracasando”.

Las estimaciones privadas de inflación van del 36 al 38 por ciento para el 12016, muy lejos del 20 por ciento que arriesgó Macri en Davos.

Por su parte, el estudio de Orlando Ferreres anticipó una subade precios anual del 38% y el informe de la consultora Estudio Bein estimó lainflación en el 36%, muy por encima del techo de 25% anunciado por el ministrode Hacienda Alfonso Prat Gay y el 20% estimado por Macri en Davos.

Para Oscar Matayoshi de InfoComex, hay que distinguir que estosfenómenos son de corto plazo. El economista vaticinó que en el largo plazo, undólar a $15 no es el piso, sino el techo. "En seis meses, el tipo decambio actual es bajo; pero en el largo plazo, cuando ingresen los dólares queestán esperando a entrar tras el acuerdo con los holdouts, no”, apuntó Matayoshi.

“Al inversor de largo plazo le interesa más ver que hay unareforma tributaria que baja alícuotas, reduce el IVA a 18%, amplía la basetributaria, que reduce la evasión y la corrupción, bancariza y esteriliza yfrena la maquinita de billetes porque eso es lo que le da mástranquilidad", agregó.

Para él, "todavía falta y va a haber ruido" con lasparitarias y la actualización de tarifas energéticas. Pero a la vez, el arreglocon los holdouts y la cosecha gruesa, van a hacer que"tarde o temprano el Banco Central compre dólares porque en esencia somosun país exportador".