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"Nunca vamos a dejar un gobierno sin presupuesto", la promesa que hizo Cristina hace un mes

En una de sus últimas apariciones dijo que gobernar sin presupuesto "impacta en los de más abajo, los más vulnerables".

El kirchnerismo dejó a María Eugenia Vidal sin presupuesto para el 2016 y rompió una promesa que Cristina Kirchner hizo hace apenas un mes, en uno de sus últimos discursos como Presidenta de la Nación.

"No vamos a dejar nunca un gobierno sin presupuesto", arengó Cristina el 25 de noviembre pasado, cuando encabezó un acto por la remodelación y expansión del Hospital Posadas junto a Daniel Scioli, Carlos Zannini, Axel Kicillof y Aníbal Fernández, entre otros funcionarios.

Cristina recordó ese día que el ‘Grupo A’ de la oposición la dejó sin presupuesto en 2011 y prometió no pagar con la misma moneda. "Quedensé tranquilos que no vamos a hacer las cosas que nos han hecho a nosotros", dijo Cristina tres días después de la victoria de Mauricio Macri. "Vamos a colaborar con lo que viene, no vamos a dejar nunca un gobierno sin presupuesto como me tocó a mí en 2010”, aseguró la ex mandataria.

Incluso, Cristina reconoció ese día las consecuencias negativas que provoca dejar a un gobierno sin esa ley. "Sabemos de las responsabilidades de gobierno, que cuando no se cumplen, no impactan en los ricos, sino en los de más abajo, en los más vulnerables”, afirmó.

"Por eso sostenemos las instituciones, la gobernabilidad, porque cuando ésta se rompe como en 2001, los más vulnerables son los que sufren, los que pierden la vida", insistió Cristina, que aseguró que "este espacio político va a sostener la gobernabilidad".

Según denunció el PRO esta mañana, habría sido la propia Cristina Kirchner quien ordenó desde Santa Cruz al jefe bloque de diputados bonaerenses del kirchnerismo, el camporista José Ottavis, que haga caer la sesión donde se trataría el presupuesto y el pedido de endeudamiento de Vidal.

Además de la promesa de hace un mes, Cristina había sido muy dura en 2010 cuando la oposición no le aprobó el presupuesto, y una situación con la que se victimizó cada vez que pudo, al declararse “la primera presidenta de la historia que gobierna sin presupuesto”.