Corrupción

Hotesur: Lorenzetti, clave en el voto de Hornos contra Cristina

El presidente de la Corte le pidió al camarista que mantenga a Bonadio en la causa Hotesur. Los mensajes a Cristina.

 Ricardo Lorenzetti fue la pieza clave del sorpresivo giro de Gustavo Hornos respecto a la recusación de Claudio Bonadio en la causa Hotesur. El titular de la Corte Suprema se encargó personalmente de trasmitirle al camarista su interés en mantener al juez federal al frente de la investigación que más preocupa a Cristina Kirchner.

Hornos estaba inclinado a votar a favor del apartamiento de Bonadio hace dos semanas, pero luego empezó a dudar por temor a un escrache como el que sufrió su colega Jorge Ballestero y el miércoles terminó firmando el fallo a favor de la confirmación del juez. Su voto se sumó al de Luis María Cabral, el integrante de la Sala I de la Cámara de Casación más cercano a Lorenzetti. De nada le sirvió a la Casa Rosada la lealtad de Ana María Figueroa, a la que ahora solo le queda demorar la resolución.

En el medio, fue clave el papel de Lorenzetti. El titular de la Corte repite en privado a sus más cercanos jueces y fiscales que hay que marcarle algún límite institucional a Cristina. Un discurso que también sugirió en sus últimos discursos públicos, y que ahora ha empezado a traducir en acciones.

En ese contexto, Lorenzetti se convenció -o tuvo información certera- de que la Presidenta iba a avanzar con la ampliación de la Corte, una medida que estaba destinada a licuar su poder a partir de la inclusión de conjueces afines. El magistrado supo que no se trataba solo de ruido mediático o una amenaza velada, por lo que salió con los tapones de punta.

Su más evidente reacción a la maniobra de Cristina fue el fallo que declaró nula la lista de conjueces de la Corte que el kirchnerismo aprobó el año pasado en el Senado, en un trámite que había sido impugnado por la oposición por inconstitucional. Por si acaso, también adelantó la votación para que lo reelijan hasta 2019.

Pero quizás la más peligrosa medida de Lorenzetti fue el aval de la Corte (en la desestimación de un recurso del ex juez Juan José Galeano ) a la doctrina de la “cosa juzgada irrita”, que habilita a la reapertura de causas que habrían sido cerradas por presiones del poder o maniobras fraudulentas.

Como reveló LPO, el fallo generó un cimbronazo en el Gobierno, donde hay alarma por una jurisprudencia muy inquietante para Cristina y los funcionarios más complicados en los casos de corrupción. Es que los jueces federales quedaron habilitados para reabrir causas cerradas a la fuerza, como la de enriquecimiento ilícito contra la Presidenta.

El tercer frente de acción de Lorenzetti para frenar a Cristina fue salvar a Bonadio. El presidente de la Corte tomó la iniciativa y se reunió con Hornos, el voto clave de la Sala I de la Cámara de Casación.

En ese encuentro, Lorenzetti repitió su visión acerca de la “necesidad” de ponerle límites institucionales al Gobierno. Y fue muy claro respecto a la causa Hotesur: no podía permitir que Cristina se salga con la suya y logre apartar a Bonadio. Hornos entendió con claridad el mensaje.

La causa Hotesur es, por lejos, la que más preocupa a Cristina debido a que uno de los nombres más complicados en la trama de los negocios hoteleros con Lázaro Báez es su hijo Máximo. Además, sabe que Bonadio está dispuesto a ir a fondo y llevarlo a indagatoria. Es por eso que ahora también intenta llevar la causa a la justicia de Río Gallegos.

Las presunciones de Cristina sobre las intenciones de Bonadio están en lo cierto. El magistrado está absolutamente jugado en esta causa y en Comodoro Py se comenta que en los próximos meses va a haber muchas novedades.

Por ahora, Bonadio no habla con casi nadie y trabaja casi blindado, no quiere que se filtre ninguno de sus movimientos en la investigación. Lo único que repite es que va a ir a fondo, quizás envalentonado por las muestras de apoyo que ha recibido en las últimas semanas. Bonadio siente que ya dejó de ser el juez de la servilleta o el amigo de Corach, y ahora se ve como uno de los responsables de frenar a Cristina. Jugado en ese rol, había comentado que renunciaría a su cargo de juez si le sacaban la causa Hotesur.