Otro fracaso del Gobierno en la Justicia: Campagnoli vuelve a la fiscalía
En un nuevo fracaso del Gobierno en la Justicia, José María Campagnoli, el fiscal que investigaba al empresario K Lázaro Báez, fue repuesto en su cargo en la fiscalía de Núñez-Saavedra en votación dividida del jury que lo sometía a juicio político.
Los jurados levantaron la suspensión que pesaba sobre Campagnoli, acusado de mal desempeño por la jefa de los fiscales, la oficialista Alejandra Gils Carbó.
A favor de Campagnoli votaron Juan Octavio Gauna (por la Corte Suprema) y Francisco Panero y Adriana Donato, por los abogados (ambos abogados), más Leandro Miño, elegido para reemplazar a la renunciante María Martínez Córdoba, mientras en contra lo hicieron Daniel Adler (Procuración), Ernesto Kreplak (Ejecutivo) y Rodolfo Ojea Quintana (Senado).
No obstante, pese al levantamiento de la suspensión, podría continuar el juicio.
La restitución de Campagnoli representa un duro revés del Gobierno, que en los últimos meses viene recibiendo un duro embate de la Justicia, en especial de los jueces federales de primera instancia (algo que comenzó a gestarse el año pasado), ámbito en el que durante años estuvieron congeladas -o pasaron al olvido- las causas más sensibles para los funcionarios.
El ejemplo más claro es el grupo que formó Rodolfo Canicoba Corral junto a María Servini de Cubría y Ariel Lijo, y al que se acerca Claudio Bonadío. Se trata de un proceso de reciclamiento natural de los jueces, que huelen como nadie el final del ciclo kirchnerista. Como si fuera poco, el Papa Francisco recibió a Lijo y le pidió que luche contra la impunidad de los delitos de corrupción.
Luego de ese encuentro, Lijo procesó al vicepresidente Amado Boudou por el caso Ciccone, pese a los reiterados intentos del kirchnerismo para quitarle la causa de las manos.
El Gobierno tampoco pudo destituir a Bonadío, que ahora está cerca de procesar a Boudou por una insólita causa de un auto trucho. El año pasado el kirchnerismo no logró siquiera que los magistrados consideraran la "reforma judicial" y varias causas dormidas empezaron a reactivarse.