Peronismo

Diputados kirchneristas denunciaron una conspiración contra el peso que busca la caída de Cristina

Acusaron al "terrorismo mediático y político" de forzar la crisis del peso. Pidieron defender la Constitución y la Democracia.

La escalada de declaraciones en torno a si Cristina Kirchner logrará terminar su mandato pasó hoy del plano de las declaraciones que inauguró el ministro Florencio Randazzo para producir su primer hecho político: El presidente de la Cámara de Diputados, Julián Domínguez juntó a 30 diputados kichneristas del norte del país para que respalden una declaración en apoyo de la Presidenta, la Constitución y la Democracia.

El comunicado denuncia un ataque de “terrorismo mediático y político” que por medio de forzar nuevas devaluaciones del peso, apuntaría a voltear a Cristina Kirchner.

La puesta en escena se concretó en la Cámara de Diputados y fue presentada como la continuidad del encuentro que los diputados kirchneristas bonaerenses tuvieron la semana pasada en Villa Gesell, sólo que esta vez se hizo ante los medios y avanzó un poco más allá de ratificar el liderazgo de Cristina para directamente insinuar que se está buscando su caída.

“Reivindicamos la institucionalidad surgida de la Constitución Nacional y la soberanía popular”, sostiene el párrafo más explícito de la declaración en este sentido.

El documento distribuido tiene la firma de 30 diputados del interior, aunque en esta ocasión se decidió no sumar a la mayoría de los bonaerenses, porteños y camporistas.

Por las dudas, se exhibieron como representantes de los “más del 130” que tiene el bloque con sus aliados, un número contundente cuando las versiones sobre una Asamblea Legislativa calientan el clima político. Y acaso el metamensaje de la conferencia de los kirchneristas haya sido la exhibición de su poder legislativo para demostrar que pueden trabar cualquier intentona golpista.

Como era previsible la movida también despertó suspicacias internas. Hubo cuatro bonaerenses invitados: Julián Domínguez, Juliana Di Tullio (jefa de bloque) y (María Teresa García secretaria parlamentaria) y Gastón Harispe, del Movimiento Octubres.

No estuvo Diana Conti, quien sorprendió días atrás al cruzar a Julián Domínguez y remarcar que ella sí siente que Daniel Scioli puede ser su candidato a presidente.

Conti sí había estado en la reunión de Villa Gesell, donde Eduardo “Wado” De Pedro intentó adoctrinar a sus pares recordándole las seis corridas bancaria que hubo durante el kirchnerismo.

Entre los firmantes se destacó el mendocino Juan Carlos Dante González, quien le había dicho a LPO que estaba dispuesto a resistir una ley de libertad sindical propuesta por Edgardo Depetri.

Pero no hubo diputados que responden al gobernador de Misiones, Maurice Closs, quien el sábado sugirió que Cristina puede terminar como Alfonsín y De la Rúa. 

No por casualidad el comunicado lo leyó su coterránea y rival interna Julia Perié, de fluido diálogo con Cristina. 

-¿Qué sectores políticos pueden querer que la Presidenta se vaya antes, como reveló el ministro Randazzo? –preguntó LPO en la conferencia de prensa.

-Creo que el documento deja todo claro cuando habla de institucionalidad –eludió Julián Domínguez.

“Vos sabes de quien estamos hablando”, fue la respuesta que luego le dio a este medio otro diputado oficialista.

Después de la presentación de Perié, el formoseño Juan Carlos Díaz Roig anunció el apoyo de 60 diputados de toda la República Argentina, de las regiones: NEA, NOA, Cuyo, Patagonia y Centro”. Sin embargo, el texto que difundieron tuvo 30 firmas.

La chaqueña Sandra Mendoza, ex esposa del jefe de Gabinete, fue la tercera voz en apoyar a la presidenta.

Domínguez tomó la posta al remarcar que todo se trata de “un problema político” y no económico. “La cosecha va a superar 105 millones de toneladas, están los mercados abiertos e YPF aumentó la producción. Además, ahora las economías regionales tienen un tipo de cambio competitivo”.