Massa lanza sus candidatos y sigue la campaña en Bahía Blanca y Mar del Plata
El intendente presentará sus 300 candidatos el lunes en el coqueto Museo de Arte de Tigre. Luego empezará la campaña en las principales ciudades del interior y recién después caerá en el Conurbano. Matendrá el "discurso del medio". Juanjo Álvarez, Malena y Sebastián Galmarini, los jefes de campaña.
Sergio Massa presentará el lunes a sus más de 300 candidatos en toda la provincia con un prolijo acto en el vanguardista Museo de Arte de Tigre, uno de los emblemas de su gestión. El acto fue diseñado para la televisión y mantendrá la estética modernista estilo campaña norteamericana que el ex jefe de Gabinete trata de imprimirle a sus presentaciones.
El acto marcará además el puntapié inicial de sus demoradas recorridas por la provincia. El evento fue diseñado por quienes ya son reconocidos como los jefes de la campaña: Juan José Álvarez y Malena y Sebastián Galmarini, hermana y cuñado de Massa.
Este trío definió que Massa comience su campaña en el interior bonaerense, que reúne el 30% del padrón, pero donde su figura es tal vez menos conocida.
Para la semana próxima hay pautadas visitas a Bahía Blanca, Mar del Plata y el distritos del sur de la provincia, como Punta Alta y Tres Arroyos, los más alejados.
Bahía Blanca, Punta Alta y Tres Arroyos integran la sexta sección electoral, donde la lapicera del massismo la tuvo Dámaso Larraburu, el histórico operador del PJ, activo en el armado del bloque massista en el Senado bonaerense.
Aunque no se animan a confirmarlo, la idea del massismo es que Darío Giustozzi lo acompañe, lo que le impediría continuar con su agenda propia al intendente de Almirante Brown y segundo en la lista de diputados.
Desde el cierre de listas Massa casi no se movió de Tigre: lo hizo por primera vez ayer en San Miguel, distrito gobernado por su aliado Joaquín de la Torre.
Los preparativos fuertes en rigor comenzaron ayer, cuando Massa convocó a sus 300 candidatos al Hotel Interamericano de Tigre para una sesión de fotos.
Allí el intendente por primeraa vez le bajó línea bien clarita a sus candidatos. Básicamente reforzó su idea de salir por arriba d ela polarización que entiende tensiona a la sociedad, entre kirchnerismo y antikirchnerismo. "Sigan lo que yo digo, manejense en ese registro", les pidió. Habló además de la necesidad de ir hacia liderazgos que se manejan en "la pluralidad" y no en base a "obsecuentes". Un tiro por elevación a la Casa Rosada.
Llamó la atención de los presentes que les pidió que no confronten con los intendentes. "Si ven en sus ecorridas que hay alguna obra piola, destaquenla y después anuncien lo que vamos a hacer, pero no los critiquen sino es necesario", reclmaó, agigantando la idea que o bien tiene o bien s eimagina posible un acuerdo con muchos jefes comunales que hoy todavía están en el kirchnerismo.
Su discurso fue muy bien recibido y sorprendió: "Fue un discurso político de los buenos, tiene las cosas muy claras", afirmó a LPO uno de los presentes.
Otro d elos temas que se analizaron ayer es con que agencia de publicidad se trabajará la campaña. Si bien Massa venía trabajando con Ernesto Savaglio, creador de la marca +a, otras cinco agencias acercaron propuestas.
Savaglio, que fue el creador del color amarillo para el PRO, enfrenta algunos reparos porque también trabaja o trabajó con Daniel Scioli -a quien endosó el color naranja-, hoy parado enfrente de Massa.
El único asesor que sigue noche y día a Massa es Sergio Bendixen, el peruano que trabajó para ayudar a Barak Obama a sumar el voto hispano, que terminó siendo clave en su reelección.
El acto marcará además el puntapié inicial de sus demoradas recorridas por la provincia. El evento fue diseñado por quienes ya son reconocidos como los jefes de la campaña: Juan José Álvarez y Malena y Sebastián Galmarini, hermana y cuñado de Massa.
Este trío definió que Massa comience su campaña en el interior bonaerense, que reúne el 30% del padrón, pero donde su figura es tal vez menos conocida.
Para la semana próxima hay pautadas visitas a Bahía Blanca, Mar del Plata y el distritos del sur de la provincia, como Punta Alta y Tres Arroyos, los más alejados.
Bahía Blanca, Punta Alta y Tres Arroyos integran la sexta sección electoral, donde la lapicera del massismo la tuvo Dámaso Larraburu, el histórico operador del PJ, activo en el armado del bloque massista en el Senado bonaerense.
Aunque no se animan a confirmarlo, la idea del massismo es que Darío Giustozzi lo acompañe, lo que le impediría continuar con su agenda propia al intendente de Almirante Brown y segundo en la lista de diputados.
Desde el cierre de listas Massa casi no se movió de Tigre: lo hizo por primera vez ayer en San Miguel, distrito gobernado por su aliado Joaquín de la Torre.
Los preparativos fuertes en rigor comenzaron ayer, cuando Massa convocó a sus 300 candidatos al Hotel Interamericano de Tigre para una sesión de fotos.
Allí el intendente por primeraa vez le bajó línea bien clarita a sus candidatos. Básicamente reforzó su idea de salir por arriba d ela polarización que entiende tensiona a la sociedad, entre kirchnerismo y antikirchnerismo. "Sigan lo que yo digo, manejense en ese registro", les pidió. Habló además de la necesidad de ir hacia liderazgos que se manejan en "la pluralidad" y no en base a "obsecuentes". Un tiro por elevación a la Casa Rosada.
Llamó la atención de los presentes que les pidió que no confronten con los intendentes. "Si ven en sus ecorridas que hay alguna obra piola, destaquenla y después anuncien lo que vamos a hacer, pero no los critiquen sino es necesario", reclmaó, agigantando la idea que o bien tiene o bien s eimagina posible un acuerdo con muchos jefes comunales que hoy todavía están en el kirchnerismo.
Su discurso fue muy bien recibido y sorprendió: "Fue un discurso político de los buenos, tiene las cosas muy claras", afirmó a LPO uno de los presentes.
Otro d elos temas que se analizaron ayer es con que agencia de publicidad se trabajará la campaña. Si bien Massa venía trabajando con Ernesto Savaglio, creador de la marca +a, otras cinco agencias acercaron propuestas.
Savaglio, que fue el creador del color amarillo para el PRO, enfrenta algunos reparos porque también trabaja o trabajó con Daniel Scioli -a quien endosó el color naranja-, hoy parado enfrente de Massa.
El único asesor que sigue noche y día a Massa es Sergio Bendixen, el peruano que trabajó para ayudar a Barak Obama a sumar el voto hispano, que terminó siendo clave en su reelección.