Crisis en el PRO: creen que por torpes fueron funcionales al kirchnerismo

En el partido de Macri dicen que se debió intentar una salida política antes de intentar demoler el taller del Borda con la Policía Metropolitana. La orden la dio a Chaín y pasó por encima de Montenegro. "No puede ser que le regalemos la cancha al kirchnerismo", se lamentan. El influyente rol de Vidal.
En el PRO no ocultan su furia por el descontrol del operativo de la Policía Metropolitana en el taller del hospital Borda, porque consideran que los incidentes pudieron haberse evitado y no hicieron más que aliviar al kirchnerismo en una semana con todas en contra. "Faltó política, para conducir a la policía, para negociar con los que protestaban", reconocían en el macrismo.

"Cacerolazo, reforma judicial, irrupción en Clarín, dólar a más de 9 pesos: Era la peor semana del kirchnerismo y vamos y le regalamos toda la cancha", se lamentaban en el PRO. Otro importante dirigente de ese espacio agregaba: "Somos muy infantiles y caprichosos, algún día la suerte nos va a abandonar".

La orden de reprimir la dispuso el ministro de Desarrollo Urbano, Daniel Chaín. Aunque tiene la fuerza a su cargo, Guillermo Montenegro, a veces no se entera de decisiones que vienen de la cúpula del PRO que habla directamente con el jefe y el subjefe de la policía local.

La vicejefa de Gobierno María Eugenia Vidal reconoció que reconoció que la administración macrista no tenía ninguna orden judicial para desalojar el predio del Borda, pero sí tenían el aval para avanzar con las obras en el Taller Protegido n° 19.

Se basan en un fallo de la jueza Andrea Danas que avaló el cumplimiento de los requisitos que se le habían exigido al gobierno porteño para continuar con la construcción del Centro Cívico.

La obra venía demorándose pero Chain decidió cortar por lo sano y mandó a iniciar los trabajos con custodia policial y la orden concreta de evitar cualquier protesta que interrumpa la construcción.

“Lo que no entienden es que esto hay que trabajarlo políticamente. No se puede irrumpir así e ir al choque porque termina mal”, protestaba esta tarde un influyente dirigente del PRO, conocedor del trabajo en los barrios carenciados.

Su bronca crece cuando recuerda lo mal que la pasó el kirchnerismo esta semana.
“Venían del cacerolazo, de la polémica reforma judicial, el dólar a 10 pesos y la irrupción en Clarín. Ahora nadie habla de eso”, se lamentó.

La influencia de Vidal

Como en la inundación del 2 de abril, María Eugenia Vidal volvió a cobrar protagonismo en una crisis del Gobierno porteño y comenzó a tornarse indispensable para aportar calma.

Aquella vez Vidal supo de la trágica inundación temprano cuando Macri descansaba en Brasil y desobedeció la orden del equipo de comunicación liderado por Marcos Peña, que era esperar al jefe de Gobierno antes de decir una palabra.

“Salió a recorrer barrios y no se iba a esconder de la prensa. Está claro que ella pude influir en el equipo de gestión pero no en el de comunicación”, razonan a su alrededor.

Este mediodía, la vicejefa volvió a liderar la primer conferencia de prensa que dio el Gobierno porteño. hasta en la opiosición le reconocen que en las situaciones de crisis, cuando el PRO enfrenta severos cuestionamientos, Vidal se maneja con solvencia y ofrece una imagen que mezcla candidez con seguridad que cae bien en la gente.

Su crecimiento político es tan evidente, que se afianza la posibilidad de que finalmente sea la candidata del PRo a suceder a Macri en el 2015 si no termina de prender en el electorado la postulación de Horacio Rodíguez Larreta.