En el Gobierno minimizan la protesta: "Fue una marcha, no un cacerolazo”
En la Casa Rosada dicen que no habrá cambios por la protesta. Consideran que perjudicó el clima previo con las denuncias de Lanata, pero destacan que a diferencia de anteriores manifestaciones, esta no incluyó masivos cacerolazos en las casas. "Fue una marcha", sintetizan.
En el Gobierno creen que la manifestación que hubo en todo el país no fue un cacerolazo sino una marcha pacífica y aseguran que Cristina no modificará su agenda en nada.
“Fue una marcha importante, masiva, pero no hubo hechos de violencia ni una actitud revulsiva. No se trató de un cacerolazo porque la gente no protestó en sus casas”, señalaron a LPO voceros de la Casa Rosada.
Creen que el clima previo contribuyó a sumar gente, por la denuncia de corrupción del programa de Jorge Lanata y el fallo sobre la ley de medios que benefició a Clarín.
Pero uno de los temas actuales que más provocaron furia en los manifestantes fue la reforma judicial que avanzó esta semana en el Congreso. Las pancartas no inquietaron a Cristina.
“No vamos a cambiar nada”, insistieron en la Casa Rosada. Sin embargo, el Gobierno evitó confrontar: Los funcionarios no se hicieron ver y la Policía Federal lejos de hostigar a los manifestantes, ordenó el tránsito en las zonas de mayor concentración y dejó libres las avenidas para que la gente pudiera marchar.
“Fue una marcha importante, masiva, pero no hubo hechos de violencia ni una actitud revulsiva. No se trató de un cacerolazo porque la gente no protestó en sus casas”, señalaron a LPO voceros de la Casa Rosada.
Creen que el clima previo contribuyó a sumar gente, por la denuncia de corrupción del programa de Jorge Lanata y el fallo sobre la ley de medios que benefició a Clarín.
Pero uno de los temas actuales que más provocaron furia en los manifestantes fue la reforma judicial que avanzó esta semana en el Congreso. Las pancartas no inquietaron a Cristina.
“No vamos a cambiar nada”, insistieron en la Casa Rosada. Sin embargo, el Gobierno evitó confrontar: Los funcionarios no se hicieron ver y la Policía Federal lejos de hostigar a los manifestantes, ordenó el tránsito en las zonas de mayor concentración y dejó libres las avenidas para que la gente pudiera marchar.