Bruera cree que lo peor ya pasó y por ahora evita confrontar con Scioli

En el entorno del intendente de La Plata consideran que, en términos políticos, lo peor ya pasó. Evalúan una semana con signos positivos para el gobierno municipal. Señalan la decisión de hablar en el Concejo, la convocatoria a un plan de reconstrucción y la baja convocatoria a las protestas. Por ahora evitan confrontar con Scioli. 
A 10 días de la inundación que dejó en jaque a la ciudad de La Plata, el intendente de La Plata considera que lo peor ya pasó para su gobierno. En el marco de una inundación sin precedentes considerada la peor tragedia natural que sufrió la capital provincial, en términos políticos evalúan un cierre de semana “positivo”.

¿Los motivos? En primer lugar en el entorno de Pablo Bruera consideran un logró la decisión del jefe comunal de inaugurar el miércoles las sesiones ordinarias del Concejo Deliberante. En el círculo íntimo del intendente hubo posturas encontradas sobre la decisión y en las horas previas, hubo quienes aconsejaron que no era el momento para una exposición pública de esas características.

Sin embargo, el propio Bruera tomó la decisión de inaugurar las sesiones. Fue algo atípico: No hubo banderas, escasa militancia y nada de cánticos. El jefe comunal agradeció a Cristina Kirchner por la ayuda, ninguneó a Daniel Scioli, pidió ayuda internacional para avanzar en las obras hidráulicas y descartó la posibilidad de su renuncia.

Por el contrario, el eje institucional estará puesto en un plan de reconstrucción de la ciudad que tendrá el Concejo Deliberante como epicentro y para el cual fueron las instituciones más importantes de La Plata. “La gran mayoría estuvo acá y las que no pudieron estar ya se están acercando”, confiaron a LPO fuentes del Ejecutivo.

Por el contrario, las protestas pautadas para esta semana no resultaron numerosas. El jueves al mediodía un grupo de vecinos cortaron la calle frente al Palacio Municipal. Fue una protesta difundida en las redes sociales y que lograron un espacio importante en algunas radios de la ciudad. Sin embargo, la protesta no logró la magnitud esperada.

La oposición parece desdibujada. Hoy concejales del Frente Amplio Progresista (FAP) presentaron un pedido de interpelación para que Bruera explique la actuación del Ejecutivo municipal durante la tragedia. Lo cierto es que -más allá de esta presentación- aún no aparece en el legislativo local un proyecto para crear una comisión investigadora.

Mientras tanto, los cuestionamientos del gobierno nacional parecen haber menguado a la espera de la auditoria encargada por Cristina Kirchner a la Universidad de La Plata. El informe final de esa investigación deberá estar en unos 35 días. En el municipio el resultado del trabajo no preocupa en términos políticos: “La auditoría puede ser un peso para Daniel Scioli, no para nosotros”.

El círculo más cercano a Bruera trabaja sobre la documentación en la que basará su defensa en caso de más cuestionamientos por la falta de obras. En esos papeles existen varios pedidos desde el municipio a la Provincia para que avancen las obras de saneamiento de los arroyos.

En paralelo, señalan un plan integral de obras -redactado por la Provincia- que incluía la realización de derivadores y readecuaciones de las redes de desagües en el casco urbano de La Plata, definido como “solución” para la problemática hídrica que genera la cuenca del arroyo El Gato. El trabajo fue elaborado hace tres años por el ministerio de Infraestructura bonaerense pero los trabajos al final no se encararon.

Por ahora, a pesar de las objeciones de Scioli al Código de Ordenamiento Urbano -la normativa municipal que rige la construcción en la Ciudad-, en el gabinete de Bruera prefieren evitar la confrontación con el gobierno provincial. Ayer, el hermano del intendente, el diputado provincial Gabriel Bruera, aseguró a LPO que “el Código no tuvo nada que ver con la inundación”. Por ahora, hasta ahí llegan las declaraciones.