Scioli le apunta a Bruera y le recuerda las objeciones al código de edificación

El gobierno bonaerense busca despegarse del Código de Ordenamiento Urbano redactado por Pablo Bruera y aprobado en medio de una fuerte controversia por el Concejo Deliberante en a fines de 2010. Según Cristina Álvarez Rodríguez, la Provincia lo convalidó solo parcialmente objetando más de 30 artículos. 
Daniel Scioli también busca responsables por el feroz temporal que azotó a la ciudad de La Plata hace una semana que dejó -oficialmente- un saldo de 51 víctimas. El Gobernador apunta al Código de Ordenamiento Urbano, la norma madre que regula la construcción en los municipios.

Ayer, el mandatario pidió revisar los códigos de los municipios como medida para “enfrentar los desafíos” del crecimiento y el cambio climático. En esa línea se pronunció hoy la ministra de Gobierno, Cristina Álvarez Rodríguez, puntualizó algunas consideraciones sobre el Código que rige en la capital provincial, quizás uno de las causas por la tragedia del 2 de abril.

El caso es que fue el propio gobierno de Daniel Scioli que validó esa normativa en mayo de 2011. El Gobernador recibió a Bruera en su despacho y hablaron de “un crecimiento ordenado, moderno” para la capital provincial. Nada de comunicó por entonces de las objeciones por parte del gobierno provincial.

Hoy, Álvarez Rodríguez aseguró que “la Provincia lo convalidó solo parcialmente y objetó más de 30 artículos”.

La ministra agregó que luego, una ONG planteó ante la justicia la invalidez de ese Código, terminando en la Corte Suprema provincial.

Según la ministra, “es el municipio quien debía revisar los conceptos que habían sido observados e inició el proceso de reacondicionamiento de estos ítems, que se encuentra actualmente en trámite”. En concreto: La Provincia alertó sobre las consecuencias del Código y el proceso de revisión está estancado en la Justicia.

Un Código polémico votado


La historia del Código que rige en La Plata fue aprobado en el Concejo Deliberante en medio de una fuerte polémica por las alertas que elevaron concejales opositores, especialistas de la facultad de Ingeniería y asociaciones de preservación del patrimonio arquitectónico.

En el Ejecutivo, quien estuvo a cargo de la redacción fue el secretario de Gestión Pública de la Comuna, Jorge Campanaro, un hombre que responde a Raúl Kraiselburd, el director del diario El Día y hoy se desempeña como secretario General.

El tratamiento de la norma en el Concejo local estuvo plagado de denuncias y polémicas. Incluso la entonces concejal opositora Teresa Urriza denunció que el entonces concejal oficialista, Enrique Caparelli, le había robado un grabador con el que intentaba registrar la discusión de la comisión de Planeamiento. Por entonces el periodismo tuvo acceso restringido a las discusiones entre concejales por el tratamiento del Código.

Durante todo el proceso de discusión en el legislativo local, el oficialismo se negó a realizar cambios. Sólo aceptó algunos cuando se acercaba la fecha pautada para su aprobación.

Pero al momento de votarse, los concejales de la oposición decían no saber el contenido de la versión final. Por teléfono, desde el bruerismo lograron convencer a un puñado de concejales que permitieron el número necesario para su aprobación.