Desde el fallo a favor de los fondos buitre, el seguro de los bonos se encareció 1000 puntos

Los seguros de default pasaron de 940 a 1965 puntos, desde que la Cámara de Apelaciones neoyorkina ratificó el fallo del juez Thomas Griesa que obligaba a pagar a los holduts que quedaron fuera del canje de deuda. Así, los bonos argentinos son más riesgosos que los de Guatemala y El Salvador.
Hace ya una semana que se dio a conocer el fallo de la Cámara de apelaciones de Nueva York a favor de los fondos buitres que embargaron a la Fragata Libertad en Ghana. Los negativos efectos en los mercados no se hicieron esperar, particularmente por temor a un “default técnico”.

Es que las demandas de los bonistas que no entraron en el canje de deuda se basan en la ley de pari passu, que obliga al emisor del bono a tratar a todos los tenedores de la misma forma. De esta forma pudieron escudarse bajo el argumento de discriminación, y si la Argentina decide no pagar, se entraría en un default con ellos.

La consultora ACM reporta que durante los últimos días hubo una caída generalizada que promedió un 14% para los títulos bajo legislación extranjera y del 9,5% para los que están bajo las leyes nacionales. El cimbronazo se hizo sentir en las calificaciones de dedua de largo plazo por parte de las agencias Fitch y Standard & Poors.

ACM señala en su informe que de esta forma la Argentina se ha vuelto uno de los países más riesgosos no sólo de la región sino también de todo el mundo. Así, el bono Discount paga un rendimiento del 13,2%, cuando uno de la misma madurez en Guatemala paga 5,4% y un título de El Salvador 6,3%.

“Incluso los CDS a 5 años de argentina, que son instrumentos creados para asegurar el riesgo de crédito ante un posible default de los títulos, alcanzó 1965 p.b., mientras que una semana atrás rondaba los 940 p.b. Tengamos en cuenta que Brasil se encuentra en torno a los 110 p.b. y Perú en 108 p.b. Estos son rendimientos que no se observaban en Argentina desde mediados de 2009, momento en el que se empezaba a dejar atrás lo peor de la crisis”, reza el estudio.

Opciones

Desde ACM resaltan la importancia de la ley Cerrojo durante el canje de la deuda del 2005. “En aquel contexto, donde obtener una tasa de participación lo suficientemente elevada como para que no pueda dudarse del éxito de la iniciativa, la Ley Cerrojo adquiría una lógica política irreprochable”, destacan.

Sin embargo, el largo proceso en el que se han empantanado las negociaciones por el default argentino del 2001 han llevado a una “mala predisposición en diversos ámbitos, tanto judiciales como en foros financieros internacionales. De este modo, la antipatía que generan inversores como Paul Singer, quienes se especializan en procurar bloquear acuerdos y luego en sacar ventajas respecto del resto de inversores, fue viéndose contrarrestada por la actitud de un deudor que, de alguna manera, se vanagloria de que no las piensa cumplir”, dicen desde la consultora, saltando a defender a los fondos buitres.

A eso se le suma el malestar que ha ido generando la falta de una propuesta para arreglar con el Club de París, como así también la negativa argentina de responder a los fallos judiciales del Ciadi.

Por el momento, el juez Griesa deberá resolver de qué manera se les pagará a los holdouts que quedaron afuera del canje, algo que sucedería recién en marzo del año que viene, pero que podría extenderse hasta el 1 de octubre de 2013, con lo que los vencimientos que tiene que hacer el gobierno al empezar diciembre y el próximo marzo no correrían riesgo.

En ese sentido, un informe de la consultora Elypsis señala que “en su fallo, el juez propone que se pague de manera proporcional: por ejemplo, si los bonos del canje son aproximadamente usd35 mil millones y el reclamo de los holdouts es de USD 1.33 mil millones, el gobierno debería pagar a los holdouts un 3.8% (es decir 1,33/35 centavos por cada dólar) de lo que pague a los bonistas”.

Y continúa diciendo que “según este criterio, los pagos inmediatos asociados al fallo definitivo serían montos pequeños: los bonos del canje pagan sólo un pequeño interés y sólo el Global 17 amortiza tempranamente (del resto, el más corto es el Discount y comienza a pagar capital recién en 2026). Pero el número puede duplicarse si se suman holdouts residentes en EEUU que aún no litigaron (y aún más, si es cierto que los litigantes andan por el mundo comprando barato bonos en default para sumarlos al reclamo). Y la cifra puede elevarse más si el juez incluye en la prórrata los pagos del cupón del PBI –aunque éste muy probablemente sea cero el año entrante".

"Por otro lado, no se puede descartar una interpretación más cruda (es decir, menos económica) del pari passu: si se le paga todo lo establecido en el canje a los que canjearon, se debe hacer lo mismo con los que no canjearon, y dado que los vencimientos de los bonos de éstos últimos fueron acelerados por el default, se debería pagar capital e interés todo de una vez. Por último, el pari passu, tanto en su versión pro rata como en su versión cruda, activaría la cláusula de Rights Upon Future Offers (RUFO) que otorga a los bonistas el derecho de beneficiarse con cualquier mejora de lo ofrecido en el canje", advierten deste el estudio dirigido por el economista Eduardo Levy Yeyati.

“Creemos que la incorporación de una excepción a la Ley Cerrojo que permita dejar el canje abierto por el tiempo en que ingrese la totalidad de los bonos elegibles, sería una ayuda importante para mejorar la imagen de incumplidor serial que nuestro país está mostrando en tribunales”, proponen en ACM.