El kirchnerismo porteño presiona a Cristina con el aborto

Luego de que Macri instrumentara el protocolo del aborto no punible por medio de una resolución, el interbloque K se aglutinó para insistir en la Legislatura con el tratamiento de un tema que la presidenta no quiere llevar al Congreso. Las críticas livianas de Bergoglio al jefe de gobierno.
El kirchnerismo porteño se unió en la Legislatura como pocas veces para pelear por una ley sobre el aborto, acaso uno de los temas más sensibles a los que se opone la propia Cristina Kirchner.

Luego de la resolución del ministerio de Salud porteño que este medio anticipó la semana pasada por la que Mauricio Macri terminó con la discusión interna de su bloque por la aplicación de un protocolo para que los hospitales públicos puedan tratar casos de abortos no punibles tras el fallo de la Corte del 13 de marzo, los legisladores del interbloque que encabeza Juan Cabandié no quisieron dejar salda la cuestión y salieron en simultáneo a cuestionar al jefe de gobierno.

Las principales críticas provinieron de María Rachid y Gabriela Alegre, las autoras del proyecto del kirchnerismo que contempla que las mujeres puedan acceder a la práctica del aborto a partir de los 14 años sólo con su consentimiento informado o de su representante legal.

Rachid, ex vice del Inadi, señaló que la resolución del gobierno porteño "obstaculiza el derecho de las mujeres" y que "viola importantes principios". En tanto que Alegre señaló que la resolución del PRO “pone obstáculos, escollos y frenos, cuando según la Corte debería funcionar como un procedimiento para eliminar barreras de acceso al derecho al aborto, para que pueda practicarse de manera rápida, accesible y segura”.

La postura a favor de una ley que regule los abortos no punibles en la Ciudad tiene el apoyo de estos legisladores tienen el apoyo de los legisladores aliados del ibarrismo y del bloque Nuevo Encuentro.

“Es sumamente negativa la decisión que tomó el gobierno de la ciudad en firmar esta resolución cuando ya tenemos dos despachos tramitando en las comisiones legislativas. Es una maniobra del Ejecutivo, cuando vio que el despacho de la oposición logró unificar distintas posturas de la oposición”, dijo María Elena Naddeo, del ibarrismo.

Conferencia Los legisladores kirchneristas se sumarán al resto de los bloques de la oposición para brindar una conferencia de prensa mañana a las 13 en la Legislatura.Allí fijarán la postura de las bancadas sobre la resolución de aborto no punible firmada por el gobierno de la Ciudad.

Según Naddeo, la resolución limita las intervenciones en caso de violación al límite gestacional de 12 semanas y “hay jovencitas más cuando tienen algún problema mental que lo detectan en estado más avanzado y no en las primeras semanas de gestación”.

La legisladora Gabriela Alegre, presentaría mañana un pedido de preferencia para que el proyecto de Alegre y Rachid sea tratado en la sesión del próximo 27 de septiembre. La legisladora María José Lubertino, anticipó por su parte que en la Comisión de Mujer que se reúne mañana “continuaremos con el debate de aborto no punible más allá de los obstáculos del PRO”. En esa reunión, el bloque macrista podría pedir el archivo de todos los proyectos sobre aborto.

Choque

Pese a las disidencias internas que se manifestaban había en un principio, este proyecto ahora se convirtió en punta de lanza de todo el interbloque, incluido Cabandié, Mateo Romeo y Dante Gullo.

Los legisladores kirchneristas no quieren dejar la imagen que quedó la semana pasada en la sesión escandalosa de la Comisión de Salud en la que el PRO cajoneó sus proyectos relacionados. Allí, los kirchneristas fueron abucheados por el público, que les recordó que Cristina Kirchner no quiere que el tema se trate en el Congreso.

En esa reunión, Lubertino fue silbada cuando dijo que antes de llevar el tema al Congreso, el kirchnerismo quería tratarlo en la Legislatura porteña.

Pero la presidenta expresó en varias ocasiones su rechazo a que el aborto sea debatido en el Congreso. En las últimas semanas de 2009, antes de que el Congreso pasara a ser dominado por la oposición, Cristina frenó un proyecto de la kirchnerista Juliana Di Tullio en la comisión de Legislación Penal.

Cristina envió a la titular de esa comisión, su amiga platense Nora César, a que frenara la iniciativa. Cuando la oposición salió al cruce la diputada César por esa acción, ella respondió: “me lo pidió Cristina”.

En tanto que en marzo del año pasado, cuando la despenalización del aborto volvió a la primera escena en el Congreso, el oficialismo se mostró dividido como pocas veces. El escozor que generó el tema en el kirchnerismo motivó que el primer dictamen que logró la interrupción del embarazo, firmado por sólo 7 diputados de los 31 que integraban la Comisión de Legislación Penal, se cayera. Incluso la oposición terminó negando su existencia.

El último capítulo que demostró que Cristina siempre aborreció el tema se dio en mayo de este año, cuando la presidenta conformó la comisión para reforma el Código Penal con juristas y representantes de la oposición. Antes de la conformación de la comisión, Cristina reunió al contingente opositor en Casa Rosada y les anticipó que el aborto no sería parte de la discusión