Moyano no logra sumar los gremios grandes al paro

Confirmó una treintena de aliados pero no todos pararían. Bancarios abrirá las puertas y los ferroviarios están divididos. Se adhirieron los docentes bonaerenses y los gremios de Barrionuevo, que cerrarán las estaciones de servicio y suspenderán los vuelos de cabotaje. Gordos e independientes dieron la espalda. Duro rechazo de sus ex socios del MTA.
Hugo Moyano no consiguió sumar a los gremios más poderosos al paro que convocó para el miércoles con movilización a la plaza de mayo, en reclamo por la suba del mínimo no imponible a las ganancias y al del tope para aplicar el impuesto a las ganancias.

En la CGT se esforzaron por aclarar que el paro es sólo de camioneros y que basta con que el resto de los gremios acompañe la movilización. “Cada uno, por cuenta, puede decidir si para o no”, explicaron a LPO fuentes de la central.

Aseguraron además que no esperaban pases de los gremios enfrentados, ya sea de los Gordos como de los independientes, quienes se apartaron por completo de la medida.

Y fueron muy pocos los sindicatos que consideraron necesario parar y ni siquiera lo harán los más importantes de “la treintena” que Moyano enumeró como aliados, como bancarios y ferroviarios.

Las principales adhesiones por fuera del esquema moyanista fueron los docentes de la provincia de Buenos Aires y los gremios de la CGT Azul y Blanca de Luis Barrionuevo. Serán quienes sí hagan sentir su apoyo con el paro de actividades.

En el primer caso la Unión de Docentes Bonaerenses (Udocba), creada por Moyano, se sumó la histórica Federación de Educadores Bonaerenses (FEB), que cuenta con unos 75 mil maestros.

Los docentes son un sector perjudicado por los límites del impuesto a las ganancias y el tope a las asignaciones. La FEB dejará expuesta al Sindicato Unificado de Trabajadores Docentes de la provincia (Suteba), liderado por Roberto Baradel, mano derecha de Hugo Yasky quien además de ser su antecesor es ni más ni menos el líder de la CTA oficialista. Ambos tuvieron un lugar en el palco en el acto de Vélez.

La CGT Azul y Blanca, liderada por el gastronómico Luis Barrionuevo, se sumará a la movilización y la hará sentir con paros en rubros sensibles, como los empleados de las estaciones de servicios.

“Desde las 12 habrá cese de actividades en todas las bocas de expendio del país”, confirmó el diputado Carlos Acuña, titular de ese gremio. Barrionuevo también agrupa a los empleados del Vidrio (de Víctor Baldez), Plásticos, Viajantes y Vialidad Nacional.

Y desde hace poco contiene también a la Asociación del Personal Ténico Aeronáutico (APTA), que encabeza Ricardo Cirielli y abarca a los controladores de tránsito aéreo. Este gremio también parará y después del mediodía no habrá vuelos de cabotaje.  

Tras una nueva reunión del Consejo Directivo de la CGT, el vocero Juan Carlos Schmid habló de la adhesión de una treintena de gremios, entre los que enumeró "bancarios, rurales, Unión Ferroviaria, pilotos, trabajadores marítimos y portuarios, Utedyc, Asociación Obrera Textil, calzado, municipales, seguro y docentes de la provincia de Buenos Aires".

Sin embargo, pocos frenarán por completo. Los bancarios anticiparon que no cerrarán ninguna entidad. “Adherimos pero no paramos”, confirmó a LPO Eduardo Berrozpe.

La Unión Ferroviaria no hizo más que mostrar su fractura con varios voceros. El secretario de Asuntos Institucionales, Mario “Oso” Rodríguez, dijo el jueves que el gremio no se sumaría, pero Moyano lo desautorizó. “Es uno que habla con el Gobierno”, lo desautorizó.

Fuentes del gremio explicaron que, por si fuera poco, el resto de los ferroviarios se dividen en dos: los cercanos a Pedraza y los más moyanistas, que son Sergio Sasia, Guillermo D´Angella.

Quienes apoyaron de entrada fueron los disidentes de siempre, de la lista Bordó, comandada por Rubén “El Pollo” Sobrero. Pero no dejaron claro si frenarían los trenes, acción que podría complicar la movilización. 

Los municipales son otra incógnita. Moyano celebró con creces cuando el gremio de Amadeo Genta y Patricio Datarmini asistió a la reunión de Consejo Directivo que convocó al congreso del 12 de julio. Se trata nada menos que de unos de los sindicatos con más congresales junto con los ruralistas y Comercio.

Pero pronto el jefe de la CGT estropeó esa relación al habilitar el ingreso de la Federación de Trabajadores Municipales de la provincia de Buenos Aires (Fesimubo) de Rubén “El Cholo” García e histórico rival de los bonaerenses de la Federación, ahora liderados por Oscar Ruggiero, quienes estallaron de ira y amenzaron con no asistir al congreso. El miércoles se sabrá si tampoco van a la plaza aunque su decisión no alteraría al resto de las provincias.

Sí se apartaron de Moyano los sindicatos que en los 90 formaron junto a él el Movimiento de Trabajadores Municipales (MTA), como Foetra, Molineros, Sadop, imprenteros y prensa.

Estos gremios firmaron una solicitada en rechazo a la movilización. “Es algo personal de Moyano. La primera vez en la historia que se anuncia un paro por televisión”.

Los moyanistas se jactan de contar con la ayuda de regionales de sindicatos rivales. Cuentan con las seccionales de Avellaneda y La Matanza del sindicato de Comercio y la cordobesa de Luz y Fuerza.