Energía

Kicillof quiere que Baratta pague el costo del desastre energético

El viceministro de Economía y La Cámpora tienen apuntado al subsecretario de Coordinación y Control de Gestión. Lo consideran responsable de la errática política de energía del kirchnerismo. Por eso, en el mercado ya especulan con la renuncia del funcionario o un acorralamiento vía judicial. 
El ascenso del viceministro de Economía, Axel Kicillof, está haciendo tambalear a las viejas estructuras del kirchnerismo al punto que uno de los tocados, aunque en forma indirecta podría ser el propio ministro de Planificación, Julio de Vido.

Es que tanto Kicillof como los principales referentes de La Cámpora tienen en la mira al subsecretario de Coordinación y Control de Gestión, Roberto Baratta, por el desastre en materia energética en los últimos años, uno de los puntos más criticados del gobierno por propios y extraños.

En el kirchnerismo aún están sorprendidos con el retrato descarnado que Kicillfof hizo en el Congreso sobre las cuestiones energéticas durante su exposición por la expropiación de YPF. Ese día, había dicho que el país “no puede darse el lujo de esperar a que el grupo Repsol se siente a discutir qué va a hacer con el gas, con el petróleo y el precio de los combustibles” con De Vido sentado a su lado, cuando el ministro fue el principal responsable de las políticas energéticas durante el kirchnerismo.

La elección de Baratta no es causal ya que siempre hizo de nexo entre la familia Eskenazy y De Vido, administró prácticamente a Enarsa y también fue el responsable de la política de cortes en el suministro para las empresas en el invierno. Además, siempre estuvo sospechados por corrupción: en su libro Sergio Shoklender directamente lo trata como “el cajero de De Vido”.

Por eso, en el marcado ya especulan con un pedido para que Baratta deje el cargo aunque el camino también podría ser que La Cámpora y Kicillof “habiliten” una suerte de embestida judicial contra el funcionario que lo lleve a dimitir.

“Baratta no tiene salida, sabe que se tiene que ir”, señalan las fuentes.