Once: un gerente de TBA declaró que el accidente fue por "una falla humana"
El gerente de material rodante de TBA, Roque Cirigliano, negó que la compañía se haya "producido un error en el sistema de freno de la formación", sino que se trató una "falla humana". Además, aclaró que no es familiar de los propietarios de la compañía: "No soy dueño ni accionista de TBA".
El gerente de material rodante de TBA, Roque Cirigliano, declaró esta mañana ante el juez Claudio Bonadío, en el marco de la causa que investiga la tragedia de Once del 22 de febrero pasado, en la que murieron 51 persona y más de 700 resultaron heridas.
Cirigliano negó haber tenido alguna responsabilidad, rechazó "haber incurrido en uso imprompio alguno del material rodante, en primer lugar porque el recurso indicado no ha sido puesto a disposición de mi persona en particular sino, en todo caso, ha sido concesionado a una persona jurídica y en virtud de un tipo de un tipo jurídico perfectamente determinado. En segundo lugar, por cuanto se trata de una imputación absolutamente laza, apresurada, y sin respaldo probatorio, ya que la causa del accidente investigado se corresponde con una falla humana".
También aseguró que no se produjo ninguna "falla en el sistema de freno de la formación, ni una avería en la infraestructura que haya siquiera incidido en la producción del siniestro", por lo que puede "concluirse que quien estaba a cargo de aplicar el freno no lo hizo".
Según Cirigliano, la empresa no incurrió en una desinversión porque "no estaríamos operando diariamente formaciones con 50 años de antigüedad y corriendo aproximadamente 900 trenes en ambas líneas por día sin que un solo peritaje, incluyendo el desarrollado sobre la formación siniestrada, haya concluido que los trenes concedidos por la administración estatal, no se hallan preparados para el servicio ferroviario, y mucho menos, que se encuentren
limitadas las condiciones técnicas generales de circulación segura".
En ese sentido, resalto que "no ha ocurrido un solo accidente en los 17 años de operación de Trenes de Buenos Aires S.A. por falla del sistema de frenos de coches Toshiba".
Por último, aclaró que "independientemente del apellido", no lo liga con los propietarios de la compañía "ninguna relación cercana de parentesco". "No soy hermano ni tampoco primo de los titulares de la empresa y mi ingreso a la misma solamente se relaciona con el profesionalismo y experiencia recogida durante mi desenvolvimiento de mas de 13 años en la empresa estatal ferroviaria. Tampoco soy dueño ni accionista de TBA S.A."
Cirigliano negó haber tenido alguna responsabilidad, rechazó "haber incurrido en uso imprompio alguno del material rodante, en primer lugar porque el recurso indicado no ha sido puesto a disposición de mi persona en particular sino, en todo caso, ha sido concesionado a una persona jurídica y en virtud de un tipo de un tipo jurídico perfectamente determinado. En segundo lugar, por cuanto se trata de una imputación absolutamente laza, apresurada, y sin respaldo probatorio, ya que la causa del accidente investigado se corresponde con una falla humana".
También aseguró que no se produjo ninguna "falla en el sistema de freno de la formación, ni una avería en la infraestructura que haya siquiera incidido en la producción del siniestro", por lo que puede "concluirse que quien estaba a cargo de aplicar el freno no lo hizo".
Según Cirigliano, la empresa no incurrió en una desinversión porque "no estaríamos operando diariamente formaciones con 50 años de antigüedad y corriendo aproximadamente 900 trenes en ambas líneas por día sin que un solo peritaje, incluyendo el desarrollado sobre la formación siniestrada, haya concluido que los trenes concedidos por la administración estatal, no se hallan preparados para el servicio ferroviario, y mucho menos, que se encuentren
limitadas las condiciones técnicas generales de circulación segura".
En ese sentido, resalto que "no ha ocurrido un solo accidente en los 17 años de operación de Trenes de Buenos Aires S.A. por falla del sistema de frenos de coches Toshiba".
Por último, aclaró que "independientemente del apellido", no lo liga con los propietarios de la compañía "ninguna relación cercana de parentesco". "No soy hermano ni tampoco primo de los titulares de la empresa y mi ingreso a la misma solamente se relaciona con el profesionalismo y experiencia recogida durante mi desenvolvimiento de mas de 13 años en la empresa estatal ferroviaria. Tampoco soy dueño ni accionista de TBA S.A."