“Isidoro Graiver no pudo ser el socio de David, no sabía un carajo lo que pasaba”

El Subsecretario de la Secretaría de Integración Nacional, Juan Pallí, habló con LPO. Su padre estuvo detenido junto con Lidia Papaleo. "La compra de Papel Prensa fue una decisión clarísima de meter presa a gente del establishment para quedarse con sus cosas", afirma. 
Juan Pallí conoce de cerca la historia de Papel Prensa. Su padre estuvo detenido junto con Lidia Papaleo y conoció de cerca a David Graiver. “Está claro que tanto Isidoro como Juan Graiver no sabían qué carajo pasaba. Sólo ‘Dudy’ (David Graiver) sabía lo que pasaba y cuál era la situación”, cuenta.

Pallí, es hoy subsecretario de la Secretaría de Integración Nacional, Jefatura de Gabinete de Ministros y defiende la versión oficial de la venta de la empresa a los diarios Clarín, La Nación y La Razón.

“Yo creo que el tema de Papel Prensa se definirá ahora en la Justicia. Pero acá no hay margaritas descalzas en quienes compraron. Cualquiera que compra algo a gente que está en prisión, cuando menos está tomando una ventaja o está pagando un precio vil”, explicó a LPO.

Juan Pallí (padre), salió de Cuba en 1960 -después de haber estado detenido brevemente por Fidel Castro-, con destino a la Argentina. En el país, junto el empresario cubano Goar Mestre fundaron la televisión argentina, entre ellos canal 13. La dictadura lo detuvo. Pasó por el Pozo de Banfield, donde compartió celda con Jacobo Timerman. Allí, en el encierro, conoció a Lidia Papaleo. Logró su libertad a los ocho meses.

Luego de la expiración de las licencias de TV y la expropiación de las productoras privadas, se dedicó a hacer consultorías con otros medios de difusión. Uno de sus clientes como consultor, fue David Graiver.

-¿Le sorprendió la declaración de Isidoro Graiver?
-Yo entiendo que todos ellos pasaron por situaciones muy fuertes y muchos están afectados. Supongo que eso tiene que ver con este cambio en sus declaraciones.

“Quien sostenga que esto no fue una cuestión económica es un absurdo. Esto no fue de derecha ni de izquierda, fue una decisión clarísima de meter presa a gente del establishment para quedarse con sus cosas”, afirma.