La causa Papel Prensa: de Capital Federal al Circuito Camps
El juez Rafecas giró la causa que enfrenta al gobierno con Clarín y La Nación. Ahora está en manos de la Unidad Fiscal de Coordinación y Seguimiento de las Causas por violaciones a los Derechos Humanos. Allí, se investiga dentro en el marco una indagación sobre los crímenes del llamado Circuito Camps.
La denuncia sobre la compraventa de Papel Prensa llegó a manos del juez federal platense Arnaldo Corazza el miércoles pasado, quien enseguida derivó la investigación en la Unidad Fiscal dedicada a causas por violaciones a los derechos humanos.
Sin embargo, la investigación fue iniciada antes de que Cristina Kirchner decidiera enviar a la Justicia el informe sobre Papel Prensa, debido a una denuncia radicada por el titular del juzgado en lo Civil y Comercial 2, Eduardo Malde, luego de notificarse de los testimonios de Lidia Papaleo y Rafael Ianover, viuda y ex testaferro de David Graiver, en una asamblea de accionistas.
El juez federal platense recibió el caso de parte de su colega porteño Daniel Rafecas, que se declaró incompetente porque parte de los supuestos hechos a investigar habrían ocurrido en la dictadura en el partido de Quilmes, episodios que ya analizaba el juez Corazza antes de que el distrito quilmeño tuviera su propio juzgado federal.
Corazza, titular del juzgado federal 3 de La Plata, investiga una causa sobre crímenes de lesa humanidad en el llamado Circuito Camps. Se trata de una veintena de centros clandestinos de detención, entre ellos el Puesto Vasco, donde estuvo secuestrado entre marzo y abril de 1977 parte del llamado "clan Graiver".
La causa recayó en la Unidad Fiscal de Coordinación y Seguimiento de las Causas por violaciones a los Derechos Humanos en la última dictadura coordinada por el fiscal Marcelo Molina e integrada por los fiscales Hernán Schapiro y Carlos Dulau Dumm.
Circuito Camps
El Circuito Camps estuvo integrado por al menos 29 centros clandestinos de detención distribuidos en 9 partidos del conurbano bonaerense y de La Plata.
Por los delitos perpetrados en el Circuito Camps irán a juicio oral el ex gobernador Ibérico Saint Jean, su ministro de gobierno Jaime Smart y los ex oficiales superiores de la policía provincial que se encuentran aún con vida: Miguel Osvaldo Etchecolatz y Rodolfo Aníbal Campos, más una veintena de supuestos represores.
Sin embargo, la investigación fue iniciada antes de que Cristina Kirchner decidiera enviar a la Justicia el informe sobre Papel Prensa, debido a una denuncia radicada por el titular del juzgado en lo Civil y Comercial 2, Eduardo Malde, luego de notificarse de los testimonios de Lidia Papaleo y Rafael Ianover, viuda y ex testaferro de David Graiver, en una asamblea de accionistas.
El juez federal platense recibió el caso de parte de su colega porteño Daniel Rafecas, que se declaró incompetente porque parte de los supuestos hechos a investigar habrían ocurrido en la dictadura en el partido de Quilmes, episodios que ya analizaba el juez Corazza antes de que el distrito quilmeño tuviera su propio juzgado federal.
Corazza, titular del juzgado federal 3 de La Plata, investiga una causa sobre crímenes de lesa humanidad en el llamado Circuito Camps. Se trata de una veintena de centros clandestinos de detención, entre ellos el Puesto Vasco, donde estuvo secuestrado entre marzo y abril de 1977 parte del llamado "clan Graiver".
La causa recayó en la Unidad Fiscal de Coordinación y Seguimiento de las Causas por violaciones a los Derechos Humanos en la última dictadura coordinada por el fiscal Marcelo Molina e integrada por los fiscales Hernán Schapiro y Carlos Dulau Dumm.
Circuito Camps
El Circuito Camps estuvo integrado por al menos 29 centros clandestinos de detención distribuidos en 9 partidos del conurbano bonaerense y de La Plata.
Por los delitos perpetrados en el Circuito Camps irán a juicio oral el ex gobernador Ibérico Saint Jean, su ministro de gobierno Jaime Smart y los ex oficiales superiores de la policía provincial que se encuentran aún con vida: Miguel Osvaldo Etchecolatz y Rodolfo Aníbal Campos, más una veintena de supuestos represores.