Fellner rechazaría el proyecto para coparticipar el impuesto al cheque
Lo devolvería al Senado con el argumento de que no fue votado con mayoría especial, pese a que les comunicó a los referentes de la oposición que prefería tomarse tiempo hasta el jueves para decidir si le daba curso normal. Pero presiones de la Casa Rosada lo habrían llevado a cambiar de idea. Los opositores preparan una dura respuesta.
El presidente de la Cámara de Diputados, el kirchnerista Eduardo Fellner, devolvería al Senado el proyecto allí aprobado que dispone coparticipar el impuesto al cheque, medida que significa distribuir entre las provincias otros 10 mil millones de pesos anuales.
La iniciativa fue elaborada por el senador pampeano Carlos Verna y aprobada el miércoles pasado con 35 votos sobre los 69 presentes, lo que desató una ola de reclamos del kirchnerismo, que con preceptos constitucionales asegura que esa norma requiere de mayoría especial, esto es 37 voluntades al margen de cuantas bancas hayan sido ocupadas. La presión recayó de inmediato en Fellner, quien debía decidir si giraba el proyecto a comisiones, como hace con cada uno que le llega desde la Cámara alta.
El viernes, la presidente y el jefe del bloque de diputados del Frente para la Victoria-PJ, Agustín Rossi, hicieron público su deseo de frenar el proyecto por considera nula la votación.
Fellner llegó el lunes a su despacho con el proyecto ya a su disposición y se encerró en su despacho a evaluar cómo seguir. Pidió la versión taquigráfica de la sesión, llamó a constitucionalistas y recibió a Rossi. Pero no definió nada.
El martes les comunicó a los jefes de las bancadas opositoras que no había tomado ninguna decisión y prefería esperar al menos hasta el jueves, plazo que después se extendió hasta el lunes. Después cambió de parecer y dijo que no tomará medidas “hasta que no tenga una posición consolidada no me voy a pronunciar".
Y aclaró que no había pedido tiempo sino que sólo había revindicado ante los jefes de bloque su derecho a pronunciarse.
Pero diputados de la oposición que siguieron deambulando por los pasillos del Congreso contaron a LPO que poco después de esas declaraciones, otras autoridades del bloque K informaron que por pedido de la presidenta Fellner había devolvería al Senado el proyecto para que vuelva a ser considerado.
Será la punta de lanza para que la oposición de Diputados vuelva a juntarse a reclamar reglas institucionales. Un dato: si el proyecto seguía su curso normal su aprobación no estaba garantizada ya que la centroizquierda no quiere aprobarlo y, sin ellos, los no oficialistas con suerte pueden juntar 129, el número necesario para sesionar.