Muy presionado, Fellner demora el giro de la ley de impuesto al cheque

Cobos le envió el viernes la iniciativa denostada en la Casa Rosada, donde denuncian que fue aprobada con menos votos de los necesarios. Con ese argumento Agustín Rossi consideró que el proyecto no debe tratarse, pero Fellner aún no decidió si lo frena o le da curso y lo gira a comisiones. Se espera tensa reunión de labor parlamentaria.
Hermético y sumido en su despacho, el presidente de la Cámara de Diputados, el kirchnerista Eduardo Fellner, pasó el lunes estudiando en detalle la votación con la que el pasado miércoles el Senado aprobó el proyecto para coparticipar el impuesto al cheque, trámite objetado por el Gobierno, que presiona para que no sea tratado.

Con ese peso sobre sus espaldas, el jujeño deberá decidir si le da curso normal al proyecto girándolo a comisiones, o, como pidieron a viva voz en la Casa Rosada, lo considera inválido y frena su tratamiento.

Las reprimendas a la votación llegaron desde la propia presidenta de la Nación, pasando por los ministros y por el jefe del bloque de diputados del Frente para la Victoria-PJ, Agustín Rossi.

Todos denunciaron que el proyecto fue mal aprobado porque no contó con mayoría especial, esto es 37 votos, justo la mitad más uno del Senado, número exigido para avalar cualquier cambio de partidas destinadas a las provincias.

La oposición argumenta que esa cifra no es necesaria porque no se reformó ninguna partida para las provincias sino que sólo se le quitó al Gobierno la potestad que le remite la ley que creó el impuesto al cheque de utilizar a gusto los fondos recaudados por ese tributo. Interpretaciones constitucionales se cruzan con cada tesis.

Rossi fue el más beligerante el viernes, cuando consideró que el proyecto no debe tratarse en Diputados. Esa noche Cobos, quien avaló y defendió la votación del Senado, lo remitió a la Cámara baja.

Fellner dedicó este lunes a estudiar el tema y decidir si, como hace con cualquier iniciativa que llega desde el Senado, la gira a comisiones a la espera de su tratamiento.

Su rutina incluyó un repaso a la versión taquigráfica de la votación, consultas a constitucionalistas y una breve reunión con Rossi, quien este martes defendería su posición en contra del tratamiento en la reunión de labor parlamentaria que habría por la noche.

Aunque esta reunión no está ratificada y podría ser suspendida, ya que la pasada sesión finalizó con un pedido de cuarto intermedio.