Oyarbide dijo que encontró remedios vencidos en el último allanamiento al Policlínico Bancario

El juez federal que investiga la mafia de los medicamentos truchos ordenó buscar nuevas pruebas en el hospital de la OSBA. Aademás, rechazó la recusación de Zanola. Ahora debe expedirse la Cámara Federal.
El juez federal Norberto Oyarbide confirmó hoy que en el allanamiento realizado en el Policlínico Bancario, en el marco de la causa que se investiga la mafia que adulteraba remedios, se encontraron medicamentos vencidos para pacientes con problemas cardíacos.

En otro orden, ratificó que rechazó la recusación presentada por el secretario general del gremio La Bancaria, Juan José Zanola, quien había cuestionado al magistrado por sus apariciones "mediáticas" y por considerar que en sus declaraciones incurrió en prejuzgamiento.

Oyarbide precisó que el resultado del allanamiento realizado ayer en el Policlínico Bancario "fue positivo", y agregó que "se encontró documentación y se halló en una heladera medicación destinada para pacientes cardíacos que también estaba vencida". En diálogo con la prensa en la puerta de su domicilio, el juez expresó que "la documentación incautada supera el volumen de media tonelada, todo mi equipo lo analiza durante 17 horas diarias".

"Cuando todo esto esté analizado, se realizará el llamado a declaración indagatoria", a Zanola, al empresario farmacéutico Néstor Lorenzo, entre otros, puntualizó.

Respecto al rechazo de recusación instalado por Zanola, Oyarbide aseveró: "Lo he rechazado ayer en todos sus argumentos y lo he elevado a la Sala II de la Cámara del Crimen".

El procedimiento que se llevo a cabo ayer fue por solicitud del fiscal Luis Comparatore, quien también requirió la indagatoria del director médico del policlínico, Jorge Fainstein, por las "gravísimas irregularidades" que ocurrían allí.

La causa ya suma así una lista de sospechosos que deberán ser citados por el juez Oyarbide, quien continuará al frente de la causa.

Comparatore ya pidió una batería de medidas y también una seguidilla de indagatorias para Zanola y su esposa Paula Aballay y el empresario Lorenzo, dueño de la droguería San Javier que proveía con medicamentos oncológicos y contra el HIV a la obra social bancaria.