La historia secreta de las críticas de la AMIA a Macri

Había decidido no ir al acto y oficialmente se dijo que fue por la reunión de gabinete pero fuentes del PRO revelaron que sabía que podía haber críticas por al titular de la Política Metropolitana. En la oposición salieron a destrozar el jefe comunal. El nexo entre la Mutual judía y Aníbal Fernández, la trama desconocida de un acto que tuvo al macrismo abucheado por la comunidad y la influencia kirchnerista con Cristina entre la multitud.
Las fuertes críticas de los familiares de las víctimas de la AMIA en el acto por los 15 años del atentado, Mauricio Macri volvió a ratificar su jefe de la policía porteña, Jorge “El Fino” Palacios.

Quien se encargó de hacerlo fue el secretario general Marcos Peña, quien volvió a ratificarlo y defendió su nombramiento.

“Ya lo hemos dicho: no hay ninguna sustancia sobre la causa AMIA y se lo hemos aclarado a la AMIA y la DAIA y lo han entendido. No queremos que se manosee el tema. Hemos escuchado voces de reproche y voces que están de acuerdo. La discusión es sobre la conveniencia, y esto es una discusión política”, afirmó el secretario general en conferencia de prensa.

“Es el mejor policía que puede tener la ciudad. Y representa las ideas que queremos para la fuerza: eficiencia, transparencia, y una policía vinculada a los Derechos Humanos”, dijo Peña.

A todo esto, si bien se creía que el jefe comunal estaría en el acto por los 15 años del atentado, no estuvo ya que tenía “agendada la reunión de gabinete de todos los lunes”, se informó. Tampoco estuvo el ministro de Seguridad y Justicia, Guillermo Montenegro.

Sin embargo estuvo el ministro de Educación porteño, Mariano Narodowski, quien mantiene un muy buen vínculo con la comunidad judía y, en especial, con las autoridades de la AMIA.

“Macri ha estado en algunas oportunidades y otras no. No hace falta que esté en el acto para estar comprometido con el tema, siempre lo ha estado”, destacó Peña ante los medios. Por ello, en el gobierno de la ciudad aseguraron que la reunión de gabinete no empezó hasta después del acto.

A pesar de ello, fuentes del PRO revelaron a LPO que el jefe de gobierno estaba al tanto de que podía llegar a haber críticas y quisieron evitar un “escrache” ante los familiares y la atenta mirada de todos los medios de comunicación.

Un acto a la medida kirchnerista

En el acto, y frente a todas las cámaras que mostraban sus caras repetidamente, estaban Cristina Kirchner, el ministro del Interior, Florencio Randazzo, y el jefe de gabinete, Aníbal Fernández, entre la gente escuchando la palabra de los oradores.

Qué se dijo en el actoDurante el acto, por Memoria Activa, fue Sergio Bursztein quien criticó duramente a Mauricio Macri por la designación del “Fino” Palacios. Dijo que hay una lista de "encubridores" del atentado e incluyó a Carlos Menem, a buena parte de sus funcionarios y también a Palacios.Incluso, calificó la designación del policía como "infame" y le reclamó a Macri que dé marcha atrás con el nombramiento. "Ustedes son responsables de haber decidido la inocencia de Palacios y eso nos recuerda a la dictadura militar que no queremos volver a vivir", embistió en alusión a Macri y al ministro de Justicia porteño, Guillermo Montenegro. "Palacios durante años nos aseguró al igual que el juez y los fiscales que con lo que tenía averiguado [de la causa por el atentado a la AMIA], había pruebas suficientes para condenarlos. Nos mintió. Cuando llegó el momento de confirmarlo en el juicio oral dijo que no tenía elementos para probar", relató Bursztein, quien añadió que intentaron reunirse con Macri, pero que éste nunca los recibió. Asimismo, apuntó contra el ministro de justicia de la ciudad: "Montegro: Lea las constancias de la causa, pero léalas todas. Va a ver qué rápido cambia de opinión y se lo saca de encima". "Sería saludable que el jefe de gobierno escuche cuando le hablan y no tergiverse lo que se dice. Se requiere una gran valentía para dar marcha atrás en decisiones erróneas. Aún está a tiempo de hacerlo", exigió. "No permitiremos que se sigan burlando de nuestros muertos. Jamás claudicaremos", concluyó.

Más temprano, en declaraciones radicales, el titular de la AMIA, Guillermo Borges, había criticado a Palacios en un claro cambio en la relación al PRO.

Hasta ahora las entidades de la comunidad judía se mostraron cautas hacia la designación y hasta estuvieron en una reunión con Macri y Montenegro en el palacio comunal donde escucharon los argumentos políticos, y jurídicos, para sostener al “Fino”. Desde allí se había mostrado cautos y decidieron esperar.

Sin embargo, en el acto de hoy el golpe de gracia lo dio, desde Memoria Activa, fue Sergio Bursztein, quien en una enumeración de “encubridores” puso en el mismo plano a Carlos Menem y sus funcionarios, el magistrado Juan José Galeano y al “Fino”, a quien destrozó junto a Macri por su nombramiento (ver aparte).

El abucheo contra el jefe de gobierno fue prácticamente unánime cuando empezó la embestida. Ni una palabra contra el gobierno nacional.

Ya en la presentación en la Legislatura porteña, Montenegro tuvo que sortear los gritos y críticas de Memoria Activa mientras defendía a Palacios e intentaba explicar cómo estaban sus causas judiciales.

Macri miró el acto por televisión junto a sus ministros y no se sorprendía. Por lo bajo, algunos funcionarios del gobierno porteño se preguntaban por qué se había elegido esta estrategia y culpaban al director de Relaciones Institucionales, Claudio Avruj.

Avruj no es un macrista más: fue director ejecutivo de la DAIA durante 10 años y es quien maneja el nexo con las entidades judías. De hecho él armó la reunión por el tema Palacios y fue quien también organizó el fallido acto por la conmemoración del Estado de Israel que terminó con un salvaje ataque de grupos neonazis.

“¿Por qué no se pudo parar lo del Fino mientras Aníbal aparecía como el paladín de la justicia?”, se preguntaban en Bolívar I, con bronca, los operadores macristas.

Lo cierto es que DAIA y AMIA estuvieron, hasta hoy, muy reacios a criticar al gobierno porteño, inclusive tras el ataque antisemita.

Aníbal y las entidades

Según pudo saber LPO, Borger ya sabía del contenido de las palabras de Memoria Activa. Sin mediar, lo dejó como la voz del acto. En el PRO creen que detrás de esto estuvo la larga mano kirchnerista, a pesar de la independencia que siempre caracterizó a los familiares de las víctimas.

Sin embargo no es una hipótesis descabellada: los dirigentes de las entidades de la comunidad judía estuvieron la semana pasada en un acto junto a la presidenta cuando cruzó a la Iglesia tras las críticas por la pobreza.

También hace apenas dos semanas, se reunieron con el ministro de Justicia, Julio Alak, para dialogar sobre el tema de la causa del atentado, entre otras cuestiones que no trascendieron.

Detrás de estos encuentros, y quien lleva las negociaciones, es Luis Grynwall, ex titular de la AMIA y quien llevara las cuentas de la entidad antes de presidirla.

Si bien hoy no tiene cargo formal, es quien mantiene un estrecho vínculo con el jefe de gabinete nacional y ya se presenta como futuro candidato para la DAIA, aunque de no llegar impulsaría a Aldo Donzis para su reelección.

Aníbal Fernández lo recibió formalmente e informalmente en muchas ocasiones, y suele tener un buen diálogo con él desde hace años y mientras era ministro.

Hoy mismo, tras el acto, el jefe de gabinete recibió en su despacho a Borger y Diana Siegel Van, del Comité Judío Americano. Otro gesto elocuente del vínculo que sostiene al kirchnerismo con las organizaciones de la comunidad.

Así las cosas, el vínculo podría haber sido una de las causas de cómo se desarrolló el acto de hoy en el que Macri fue uno de los blancos preferidos.

Vale decir también, que los familiares de las víctimas también cruzaron a Luis D`Elia por su vínculo con Irán (donde se niegan a extraditar a sospechosos) y a María José Lubertino, del INADI. Funcionarios menores del kirchnerismo sin peso específico que no opacaron la embestida contra el PRO.

"Los de Memoria Activa fueron usados, ellos sienten que Palacios no tiene que estar pero no se prestarían jamás a operaciones del gobierno", explica a LPO un alto operador de la AMIA que está en la vereda opuesta de la actual conducción.

De todas maneras, concluye que "fue un acto dominado por el kirchnerismo" y que fue "la primera vez" en muchos años que no se apuntó directamente al corazón del Ejecutivo nacional.