El déficit bonaerense

Scioli tomará 1.600 millones de las cajas de jubilaciones

La noticia se conoció al asumir como ministro de Economía, Alejandro Arlía. El flamante funcionario negó que ante los problemas de financiamiento se vuelvan a emitir "patacones", pero ya se oficializó un decreto que autoriza al gobierno a canjear bonos por 1.600 millones de las cajas jubilatorias. Desde la oposición los calificaron como el "Patacón de los jubilados" y advierten una inminente cesación de pagos.
El perfil bajo que mantuvo a lo largo de un año y medio el antiguo titular del Ministerio de Economía bonaerense, Rafael Perelmiter, fue abandonado por su sucesor, Alejandro Arlía, que tan sólo minutos después de asumir hoy en su nuevo cargo, declaró que está “absolutamente descartada” la posibilidad de que vuelva el Patacón (Daniel Scioli ya lo había tenido que desmentir días atrás) y, de paso, que si el pueblo de Brandsen se lo pide, sería candidato “testimonial” hasta de consejero escolar.

En un acto de asunción distendido en el que se disimuló la ruidosa ausencia del ex titular de ARBA, Santiago Montoya, que estaba invitado pero que no asistió porque está “enojado” y mantiene negociaciones con el PJ disidente; no se mencionó un tema que durante toda la jornada se debatió en la provincia: la posibilidad de que el Ejecutivo bonaerense utilice los fondos de las cajas previsionales para gastos generales.

Es que con un déficit que como adelantó este medio podría escalar de los 7 mil millones de pesos previstos a unos 12 mil millones, Scioli no descarta ninguna opoción para financiarse.

En el Boletín Oficial de la provincia emitido ayer, figura una de las últimas medidas que llevan la firma de Perelmiter al mando de Economía, además de la de Scioli y su jefe de gabinete, Alberto Pérez.

Se trata del decreto 3.947, con el que se autoriza “a la Tesorería General de la Provincia a incrementar la emisión de Letras Previsionales del Tesoro autorizada por el Decreto Nº 4306/00, por hasta la suma de pesos un mil seiscientos millones ($ 1.600.000.000), para ser entregadas al Instituto de Previsión Social de la Provincia de Buenos Aires, por los excedentes financieros que genere a partir del 1º de enero de 1997 la operatoria de ese Organismo Previsional.

Este decreto se vuelve operativo en función del artículo 2º de la Ley 12.150 –también duramente criticado por el sector gremial y la oposición–, que faculta al Poder Ejecutivo a emitir Letras Previsionales del Tesoro para ser entregadas al Instituto de Previsión Social de la Provincia de Buenos Aires, a partir de los excedentes financieros que genere su operatoria desde el Ejercicio 1997.

Esto quiere decir que la posibilidad de que el Ejecutivo utilice los fondos previsionales ya dejó de ser tal para convertirse en un hecho, algo que la oposición y los sindicatos temían desde la aprobación de la ley de presupuesto 2009 (nº 13.929), en diciembre pasado, que recibió duros cuestionamientos de todo el arco opositor por incluir los fondos previsionales dentro de los 56 mil millones del total de las Erogaciones Corrientes y de Capital del Presupuesto General de la Administración Provincial.

Ante esta realidad, uno de los gremios más duros del sector educativo, la Federación de Educadores Bonaerenses (Feb), ya presentó en la Justicia un recurso para declarar anticonstitucional la Ley de presupuesto 2009 por “incorporar al tesoro provincial los fondos del Instituto de Previsión Social”.

Criticas opositoras

Quien más criticó esta norma el año pasado fue el diputado bonaerense de la Coalición Cívica, que integra la Comisión de Presupuesto, Walter Martello. En diálogo con La Política Online, el legislador dijo que estas Letras son en sí un “Patacón de los jubilados” y que una vez que se venzan, el Estado las prorrogará, como hizo Nación “cuando emitió Letras por los fondos de Lotería Nacional”.

Martello explicó que las Letras “son una especie de bono que se le hace a los futuros jubilados, que una vez que quieran cobrar no lo podrán hacer puesto que el Gobierno, al no tener fondos, las prorrogará año tras año”. También dijo que el propio Perelmiter admitió que todos los años el Ejecutivo se apropiaba de los fondos superavitarios del IPS, pero que está vez intenta blanquear la situación con estas Letras.

El diputado oriundo de Esteban Echeverría agregó que “en rigor, el Estado provincial ya está entrando en cesación de pagos, si observamos que se encamina a un déficit de 12 mil millones de pesos, tiene una demora de 150 días en el pago de los proveedores, y está postergando licitaciones en ámbitos tan cruciales como el de la Salud”.