Vetan a Lukoil en Repsol pero entra a la región por Bolivia
El gigante ruso que intentó hacerse con un porcentaje de YPF quedó fuera luego que La Caixa anuncie que ya no negocia vender su participación en la petrolera. Sin embargo, un acuerdo cooperativo entre Rusia y el país de Evo Morales le permitirá a Gazprom y Lukoil hacer pie en la región.
Lukoil, el gigante petrolero ruso con estrechos vínculos con el primer ministro Vladimir Putin, finalmente llegará a instalarse 20 por ciento de Repsol-YPF, como deseaba, igualmente un acuerdo entre los gobiernos de Rusia y Bolivia le permitirá hacer pie en tierras de Evo Morales.
La Caixa ha anunciado oficialmente que ya no negocia vender su participación en la petrolera Repsol. La mayor caja española ha enviado un comunicado a la CNMV en el que afirma que "no mantiene ninguna negociación". Esta era, justamente, la puerta de entrada de Lukoil al petróleo argentino.
En el escueto texto, la caja hace referencia a un comunicado anterior, el del 21 de noviembre, en el que reconoció que mantenía un diálogo con la rusa Lukoil para vender parte del 20% que controla en la petrolera en forma indirecta, explica el diario español El Mundo. Sin embargo, el desarrollo de instituto de investigación científica del gas, acordado como ayuda del gobierno de Rusia a Bolivia, será el ariete del imperio petrolero ruso para llegar hasta aquí. Así fue confirmado por el ministro de Hidrocarburos boliviano, Saúl Ávalos.
La cooperación rusa se realizará mediante su instituto del gas, en el marco de las políticas hidrocarburíferas del país, según reprodujo la agencia estatal boliviana ABI. Ávalos añadió que en enero llegará al país una comisión técnica del consorcio energético ruso Gazprom, para realizar un estudio sobre el potencial energético gasífero de Bolivia, de manera gratuita y con una inversión de al menos cuatro millones de dólares.
"Esto lo hacen ellos (Gazprom y el instituto del gas de Rusia), lo financian el cien por ciento, van a elaborar un esquema general de desarrollo de la industria del gas de la república de Bolivia", señaló.
Sin embargo, los negocios petroleros del gobierno ruso generalmente llegan con una condición bajo el brazo. Esa condición, se llama Lukoil.
Por eso, el cable apenas sugiere que “la petrolera rusa Lokoil, que es una empresa privada, también llegará al país para realizar similar tarea que Gazprom”. Seguramente, bajo el brazo traerá algún que otro negocio más interesante que el desarrollo de un instituto.
Entrada frustrada
La negociación para la entrada frustrada de Lukoil en Repsol saltó a la luz en noviembre. Sacyr, agobiada por su abultada deuda, había anunciado meses antes que estudiaba vender activos, como su 20% en Repsol y su filial de autopistas Itínere.
De este modo, la constructora presidida por Luis del Rivero pareció encontrar un posible comprador para Repsol en Lukoil, una operación que no ha tenido el visto bueno del Gobierno debido a que la petrolera española se considera una compañía estratégica.
La Caixa, uno de los acreedores de Sacyr, entró también en la negociación con el objetivo, en principio, de que Lukoil alcanzara un 29% de Repsol, aspiración que disminuyó más tarde al 20%.