“La estatización de las AFJP es el segundo robo más grande de la historia”

El analista económico Agustín Monteverde dialogó con LPO comparó la rutilante medida de los Kirchner con el corralito, y la calificó como "expropiación". Entre otras cosas, dijo que son entre 13 y 15 mil millones de pesos al año en recaudación y unos 100 mil millones en fondos administrados.
¿Cómo analiza la idea del gobierno de llevar todas las jubilaciones al Estado?

Nos falta más información. En primer lugar, detrás de este anuncio lo que hay es un gran atraco a las cajas jubilatorias. El 60 por ciento de los aportes jubilatorios de las AFJP están invertidos en riesgo público, por lo cual de esta forma ya está estatizado el 60 por ciento del riesgo de la jubilación. El deterioro del rendimiento del retorno para los afiliados ha sido principalmente el riesgo público. Por lo tanto, con la crisis actual, el sistema viene perdiendo por el derrumbe de la cuenta pública que hoy está por debajo del 50 por ciento de lo que valía hace un año atrás. Por otro lado, nunca un salvataje puede ser obligatorio. Como la libertad existe, en todo caso se podía mantener abierto permanentemente el traspaso de un sistema a otro. Esto es en realidad una expropiación.

¿Es una expropiación que ronda los 100 mil millones de pesos?

Ese número no es exagerado, pero al traspaso de todos esos fondos administrados por las AFJP al sector estatal no creo que se anime el kirchnerismo. No creo que se llegue al extremo de traspasar todo ese capital, pero todo puede ser. Por eso hace falta más información. Si se llevan los 100 mil millones de pesos administrados, va a ser el segundo robo más grande de la historia. No el primero, porque el primero ya ocurrió hace algunos años. El primero es el del 2001, el “corralón”, el default y la pesificación asimétrica, porque el principal grupo que agarró fue a los jubilados.

¿Cuál es el marco legal a la hora de estatizar? ¿Se pueden o no estatizar jubilaciones privadas?

El marco legal es que en la Argentina gobernar es ser rey. Me inclino a pensar que lo van a hacer llevándolo al Congreso. La verdad, es que después de lo del campo, si se logra imponer en el debate público o meter a la sociedad en la discusión, no se si va a salir en el Congreso. Los argentinos se tienen que dar cuenta que los están robando lisa y llanamente. Los fondos del sistema de reparto van a parar a las cuentas del Estado que se están gastando alegremente. Sino que vean como la plata del Anses la gastan, y no va a haber plata a la hora de pagarle a los jubilados.

Este es el gran temor. Que estos miles de millones pasen al manejo habitual que tiene el gobierno sobre el superávit del Anses. Préstamos internos para tapar baches en los déficits de algunos ministerios, con tasas bajísimas…

Exactamente. Más que una tasa bajísima es una tasa negativa, que es mucho más grave. Lo que ocurre es que aún cuando el Estado cumpliera, la plata que cobre va a ser menos que la que puso. En lugar de capitalizar, se va a descapitalizar. ¿Por qué el Estado lo va a devolver si no tiene ningún programa financiero en marcha para poder cubrir deuda de acá a varios años?

¿Qué va a pasar con los que hoy son afiliados, entre los que ya cobran por AFJP y los millones de aportantes?

Los que cobran en las AFJP yo creo que no los pueden sacar, no los van a sacar. Sería ya un disparate.

¿Pero sí pasan los fondos?

Los temas más importantes son dos: los fondos mes por mes y los fondos que ya están siendo administrados. Los fondos administrados sería un disparate que se los saquen, pero también era un disparate que se saquen los afiliados a las AFJP cuando hasta hace poco hubo un proceso donde los afiliados podía elegir y todos estos eligieron los contrario. Lo que ratifica esta decisión es que cuando decíamos los economistas que era altamente improbable que Argentina pudiera esquivar una crisis financiera, que a su vez es una crisis cambiaria, teníamos razón. Esto confirma que la situación fiscal es un incendio.

¿Podría venir una oleada de juicios?

En el sistema están todos cautivos, no pueden hacer nada. Un afiliado puede pedirle a una AFJP que lo cambie de AFJP, pero no puede decirle “dame la plata”. La experiencia en 2001 fue que la vía judicial en la Argentina se complica. Lo que termina ocurriendo es que tendría que hacer juicio cada uno de los jubilados o futuros jubilados. Esto es un robo inconcebible, aún cuando sea de aquí para adelante y no se toquen los fondos administrados.

Ahí me detengo en una de las aristas que enunció. Porque muchos millones de esos fondos administrados por las AFJP están invertidos, forman parte del circuito financiero e inversiones bancarias. ¿Hay riesgo de una corrida? ¿Qué puede pasar con esas empresas?

Al sistema bancario le estarían quitando una base importantísima de sus depósitos y a su vez provocarías a su vez un derrumbe de los valores corporativos, porque las AFJP lo poquito que le dejan lo tratan de invertir en riesgo privado porque las han obligado demasiado a invertir en sector público. Tené en cuenta que las AFJP constituyen un actor principalísimo del mercado de capital de los argentinos, por no decir el principal. Las consecuencias no las tienen meditadas.

¿Cómo se traduciría esta movida en números?

Hoy son unos 98 mil millones de pesos en fondos administrados de los cuáles el 60 por ciento aproximadamente están invertidos en bonos públicos. Es decir que el gobierno, a lo sumo, podría recuperar de ahí un 40 por ciento. Después, la recaudación mensual son poco más de mil millones de pesos por mes, lo que daría entre 13 y 15 mil millones de pesos por año. Menos de 5 mil millones de dólares.