Elecciones 2023

Massa ignoró a Schiaretti y convocó a Llaryora a trabajar "juntos" por Córdoba

"Voy a llamar al gobernador Llaryora que es el que eligieron los cordobeses", dijo en un acto en el club de De la Sota.

En un General Paz Juniors colmado, y con gente que quedó afuera de las instalaciones del club cordobés, el candidato presidencial de Unión por la Patria (UP), Sergio Massa, ignoró los ataques que horas antes le dirigió Juan Schiaretti y convocó al sucesor Martín Llaryora a trabajar juntos.

"Voy a llamar al gobernador Llaryora que es el que eligieron los cordobeses. Le voy a decir, gobernador armemos la agenda, Córdoba es el corazón del país. Tenemos cuatro años para trabajar juntos", dijo Massa en uno de los momentos más aplaudidos por la militancia en club del que no casualmente, era hincha el exgobernador José Manuel de la Sota. Otro de los mencionados por el tigrense en el acto que cerró poco antes de las diez de la noche, después de una gira que antes había incluido una escala en Río Cuarto y un paso por James Craick.

El plan de Massa en Córdoba para no repetir el error de Scioli que le costó la presidencia

Massa, al igual que hizo en otras ocasiones e ignorando a Schiaretti, reivindicó la figura de De la Sota al definirse como "el Presidente que va a terminar con tantos años de desencuentros".

Voy a llamar al gobernador Llaryora que es el que eligieron los cordobeses. Le voy a decir, gobernador armemos la agenda, Córdoba es el corazón del país. Tenemos cuatro años para trabajar juntos.

Mensaje que caló hondo en la dirigencia del PJ que se encuentra enrolado en el cordobesismo y que tomó distancia de las críticas que en los últimos días lanzó con dureza el gobernador Schiaretti y su entorno contra Massa. Como ocurrió este lunes, con Alejandra Vigo, senadora y esposa de Schiaretti cruzando a Massa por la tarifa eléctrica y con el propio gobernador horas más tarde cuando, en el primer acto desde su gira por el exterior dijo: "el federalismo en serio no se hace cuando faltan pocos días para las elecciones". 

Pero las tensiones que el acercamiento de Schiaretti a Milei generan en el peronismo cordobés son evidentes. En ese acto en Río Cuarto, cuando el intedente peronista Juan Manuel Llamosas, mencionó al gobernador hubo silbidos entre los militantes.

"De nada sirve que vengan a firmar la Sube cuando el 75% de los subsidios queda en el Amba", dijo Schiaretti, un par de horas antes del acto de Massa en Juniors.

Después de actividades que estuvieron marcadas por la gestión y teñidas de campaña, como fue el caso de la Sube y la propuesta para los biocombustibles en Río Cuarto, en la capital cordobesa todo fue pura campaña. Por esto, no dejó de llamar la atención la manera en la que Massa desairó a Schiaretti en el discurso y cómo elevó la figura de Llaryora, quien continúa en Medio Oriente y decidió, por ahora, sostener su neutralidad.

A quien tampoco hizo mención Massa fue a su rival, Milei. Aunque, habló de la educación libre y gratuita, enviando guiños a la Universidad Nacional de Córdoba. Al igual que lo hizo cuando dijo "quiero aprovechar, para desde Córdoba, invitar al papa Francisco "pidamósle que venga a Argentina". "Él para nosotros no es el demonio como plantea el otro, es el argentino más importante de nuestra historia", dijo.

Massa habló de la educación libre y gratuita, enviando guiños a la Universidad Nacional de Córdoba.

En el cierre, Massa convocó a la única persona que compartió con él un rato el escenario: el empresario Juan Blangino. Un fabricante de mosaicos que fue clave en uno de los cierres de campaña de Llaryora a nivel provincial y que tiene a su hijo, Juan José, como parte de los legisladores provinciales del oficialismo. Con Blangino, Massa quiso enviar un mensaje al empresariado y sector productivo cordobés, en busca de achicar diferencias con Milei en un terreno esquivo para el PJ nacional.