Adquisición

Tras compra a Iberdrola, AMLO asegura que dejará las condiciones para reducir las tarifas de luz

Agradeció el acuerdo alcanzado con la empresa, aunque reiteró sus críticas a la firma española por ser de las "beneficiadas" de la privatización. "Sindicato de CFE ya tomó las plantas", dice.

 Andrés Manuel López Obrador aseguró este miércoles que con la adquisición de 13 plantas de Iberdrola garantizará las condiciones de una política energética que reducirá los precios en las tarifas de luz fortaleciendo a la Comisión Federal de Electricidad.

Durante su conferencia de esta mañana dedicó un gran espacio a la operación que anunció de manera sorpresiva el día de ayer, en la que logró un acuerdo con una de las empresas energéticas con las que mayores confrontaciones tuvo. "Es algo muy importante en beneficio de los consumidores; en esencia lo que se garantiza es que no aumente el precio de la luz. Eso es lo esencial", dijo.

Explicó que aún se están terminando de ver "elementos técnicos", pero garantizó que el fin es fortalecer a la empresa pública, dirigida por Manuel Bartlett, presumiendo que se ha cumplido la promesa de no incrementar los precios de energéticos. "Vamos a dejar condiciones para que se mantenga la misma política de precios en gasolina, gas y luz", aseguró.

John Kerry, el funcionario de Biden clave para el negocio entre Iberdrola y CFE

Ayer el gobierno anunció la adquisición de 13 plantas -12 plantas de ciclo combinado y un parque eólico, cuya transacción se estima en 6 mil millones de dólares a través de un fondo, Mexican Infrastructure Partners, el cual es dirigido por Mario Gabriel Budebo, ex funcionario de Felipe Calderón. La compra se haría con recursos del Fonadin, que podría salir al mercado de deuda para obtener los recursos. Además, el fondo también opera con capital privado, por lo que no queda claro si el gobierno participará en la inversión completamente.

Sobre la ruta del negocio López Obrador mantuvo el misterio, pero lo que sí dejó claro es que será la CFE la que opere estas plantas, incluso aseguró que ya hay personal del sindicato tomando estas plantas y con ello, garantizó que la CFE podrá producir hasta el 65% de la energía.

También aclaró que la empresa seguirá en México, es decir, a pesar de esta venta, la firma tiene al menos otros siete activos de energía renovable que seguirá operando en el país. 

Vale recordar que la política energética de la 4T, en sus puntos más políticos, impuso que la comisión tuviera mayor participación de mercado sobre los privados, lo que generó largos litigios con empresas privadas que tenían contratos de años. "Teníamos dos caminos: uno, acudir al poder judicial o reformar la constitución, muy difícil porque todo lo bloquean los conservadores están a favor de las empresas", dijo el presidente.

Un ex funcionario de Calderón detrás del fondo que opera la compra de las plantas de Iberdrola para CFE

Desde el mercado apuntan a que la compra se dio en dos momentos claves: por un lado, el plan de descarbonización de la firma en el marco de una presión por la transición energética en el mundo y sobre todo en Estados Unidos. Por el otro, también la presión del gobierno mexicano y una iniciativa que apunta por facultar a la administración publica para revisar y tomar decisiones sobre contratos que se considerara que benefician más a privados que a la nación; una idea que López Obrador ha defendido incansablemente en materia energética.

Para López Obrador se trata de un triunfo y ahora presume incluso que gracias a "frenar la privatización hemos podido contener la inflación". Vale señalar que México ha tenido los niveles más bajos en precios de energéticos debido a una política de control de precios y subsidios en gas LP y gasolina.