Hidrovía

La empresa que empujan Máxima y Macri para la Hidrovía acusada de daño ecológico en el paraíso de Maldivas

Boskalis Dredging International es cuestionada por daño ecológico en Maldivas.

 La empresa holandesa que Mauricio Macri y la reina Máxima impulsan para hacerse cargo del dragado de la Hidrovía del Paraná enfrenta una protesta por daño ambiental. Se trata de Boskalis Dredging International que tiene un contrato para dragar parte de la costa del paraíso ecológico de las Islas Maldivas.

Boskalis Dredging International firmó un acuerdo con el gobierno de Maldivas por 120 millones de dólares para dragar en las costas de Malé, la capital del país. El proyecto busca además desarrollar infraestructura portuaria.

Máxima y Macri aparecen en la puja de la holandesa Boskalis por quedarse la Hidrovía

Desde la ONG Salvemos a Maldivas denunció que no se realizaron los estudios ambientales necesarios y que se extraerán 24.5 millones de metros cúbicos de arena de un área "ecológicamente sensible". Maldivas es uno de los pocos pocos paraísos naturales submarinos que quedan en buenas condiciones, meca de buceadores de todo el mundo.

Boskalis es la empresas que, con el apoyo de Macri y de Máxima, intentó quedarse con el dragado de la Hidrovía durante el anterior gobierno y mantiene esa aspiración cuando finalmente se licite la obra.

La ONG argumentó que los trabajos de Boskalis van a provocar daños en la fauna marina del lugar, en los irremplazables arrecifes de coral y tendrá además impacto en los pescadores que trabajan en la zona. La empresa asegura que llevó a cabo todos los estudios necesarios.

Boskalis es la empresas que, con el apoyo de Macri y de Máxima, intentó quedarse con el dragado de la Hidrovía durante el anterior gobierno y mantiene esa aspiración cuando finalmente se licite la obra. También compitieron por el dragado del Río Uruguay, pero quedó segunda detrás de Jan de Nul, una firma belga que tiene actualmente el dragado de la Hidrovía del Paraná.

Como contó LPO en 2021, la reina Máxima jugó a favor del consorcio Boskalis Dredging International, una de las principales empresas holandesas en negocios marítimos y fluviales. La reina se puso en contacto con dirigentes de Cambiemos para poner a Boskalis en competencia en la licitación internacional que el Gobierno anunció ante el vencimiento de la concesión del pasado 30 de abril. Sin embargo ese proceso nunca terminó de adjudicarse.