Inflación

Pese a la suba, el viceministro de Economía ratifica la meta del 60% de inflación anual

Gabriel Rubinstein apuntó a los precios estacionales por el rebote de enero y consideró que estaban dadas las condiciones macroeconómicas para un 4%.

Luego de reconocer que el repunte de la inflación en enero les genera "bronca", Massa y su equipo cantaron retruco y aseguraron que las condiciones macroeconómicas mejorarán para que hacia fin de año la inflación se acerque al 3% anual y 2023 termine con la inflación cerca de 60%.

Según explicaron en Economía, el 6% de enero obedeció a que el segmento de los precios regulados subió 7,1%, y el de los estacionales, un 7,9%. Estos dos reúnen al 30% de los bienes cuyos precios mide el Indec. En tanto, el 70% restante integran la canasta "núcleo" y esta subió un 5,4%.

Al respecto, el viceministro Rubinstein señaló que: "Los fundamentos macroeconómicos, básicamente las políticas fiscales, monetarias y cambiarias, serían consistentes con tasas mensuales de inflación del 4% o menos. En el muy alto registro de enero, notamos diversos actores, entre ellos: a) fuerte suba en frutas y verduras, debido a factores estacionales y efectos climáticos adversos (heladas y sequía); b) fuerte suba en algunos rubros regulados, como ser boleto de colectivos, tarifas de gas, tarifas de agua, tabaco, telefonía celular e internet, y medicina prepaga; y c) aumento de los servicios de turismo, a raíz de la temporada de vacaciones".

 Seguimos trabajando desde la macroeconomía y desde la microeconomía, para que en los meses venideros se registren bajas significativas en las tasas de inflación, y esperamos que, hacia fines de año, las tasas mensuales se acerquen al 3%, y la tasa de inflación en el año pueda rondar el 60% presupuestado

En este sentido, apuntaron también a la muy importante incidencia que tienen los aspectos inerciales, ligados al alto grado de indexación prevaleciente. "En tal sentido seguimos trabajando para hacer frente a este aspecto. Los acuerdos de precios firmados registran un elevado grado de cumplimiento, por lo que confiamos que la extensión de los mismos a muchos más rubros y productos nos permitirán ir reduciendo márgenes y los mencionados factores inerciales", agregó Rubinstein.

La inercia para febrero tiene sus riesgos. Si bien, la baja de 31 días a 28 días suele ayudar a reducir la cifra inflacionaria, lo cierto es que el Gobierno necesita que la inflación de febrero quede debajo del 5,3% para no llegar al 100% interanual. Y la inflación núcleo, que marca la tendencia subyacente de los precios desde septiembre merodea entre el 5,3%.

La inflación subió en enero a 6% por el salto en turismo, carne y alimentos frescos

"Seguimos trabajando desde la macroeconomía y desde la microeconomía, para que en los meses venideros se registren bajas significativas en las tasas de inflación, y esperamos que, hacia fines de año, las tasas mensuales se acerquen al 3%, y la tasa de inflación en el año pueda rondar el 60% presupuestado", concluyó Rubinstein.

Las dudas a mediano plazo persisten

Un análisis de mediano plazo de uno de los mejores pronosticadores del REM explicó a LPO que la inflación núcleo promedio de los 12 meses previos a cada dato, lo que muestra es que "la tasa de inflación núcleo no se estancó, sino que creció progresivamente de 3% en diciembre 2020 (último dato del año de pandemia pero que toma los 12 meses 2020) hasta 5,4% en enero 2023. Esto implica, que la tasa núcleo va aumentando lentamente, no está estancada. Esto equivale a pasar de un 43% anualizado a un 88% anualizado, el doble", dijo el doctor Juan Miguel Massot, director del Instituto de Investigación de la Facultad de Ciencias Económicas y Empresariales de la Universidad del Salvador. 

 No está fácil decir que en promedio la inflación declinará; al menos no es lo que cuentan los datos de mediano plazo. Pero nunca digas nunca, quizás los datos futuros van hacia el 5% promedio y nos encontramos con el 80% anual.

"Otra cuestión interesante es la comparación de este dato de tendencia con el dato de tendencia de los estacionales: si relaciones los dos datos, te da que la tasa de inflación tendencial de estacionales es 20% mayor a la núcleo, que es exactamente igual a la que dio en enero. No hay tal excepcionalidad, sino que es una regularidad de los precios. Distinto es el caso de los regulados: mientras el dato mensual de tendencia en diciembre 2020 era la mitad del de la núcleo, en enero 2023 los datos mensuales de tendencia se igualaron; la razón son las actualizaciones de varios precios y tarifas pisados por años", agregó.

"En conclusión, no se puede decir que la tendencia de mediano plazo de la inflación general sea a la baja, sino que sea, al menos, como la actual (superior al 80% anual). No está fácil decir que en promedio declinará; al menos no es lo que cuentan los datos de mediano plazo. Pero nunca digas nunca, quizás los datos futuros van hacia el 5% promedio y nos encontramos con el 80% anual que te menciono. Pero la macroeconomía no nos ayuda sobre esta última proyección, más bien alimenta repetir, aproximadamente, la del año pasado", cerró Massot.