Efecto Sanders: ahora demócratas y republicanos debaten si hay que eliminar el término "latinx"

 El término latinx se ha convertido en herramienta política. Primero fue la recientemente proclamada Sarah Huckabee Sanders, quien prestó juramento como la primera mujer gobernadora de Arkansas prohibiendo esta palabra en los documentos del gobierno. Sanders se basó en una encuesta de Pew Research que encontró que solo el 3% de los latinos e hispanos estadounidenses usaban el término para describirse a sí mismos. Aunque en el telón de fondo está la batalla política por el lenguaje inclusivo.

Un grupo de legisladores demócratas latinos en Connecticut también está pidiendo a su estado que siga los pasos de Sanders y elimine el término "Latinx" de todos los documentos gubernamentales, alegando que el término es ofensivo.

En el idioma español, latino se refiere al varón latino, mientras que latina se refiere a la mujer latina. El término "Latinx" es no binario, lo que significa que se usa para describir a una persona que no se identifica como hombre o mujer.

El PBI latino asciende a $2,8 billones y genera una riqueza equivalente a la que producen México y Brasil juntosCon el paso de los años, el lenguaje va cambiando y evolucionando y nuevas palabras se integran al vocabulario con la finalidad de ser más inclusivas y en el caso del término "latinx", parece no resonar entre los votantes de la comunidad latina. Además, el 40% dice que el uso de la palabra les molesta o les ofende.

Por otro lado, los resultados de la encuesta indican que el uso del término puede ser contraproducente, ya que el 30% de los votantes hispanos o latinos (24% de los demócratas y 43% de los republicanos) tienen menos probabilidades de apoyar a un político u organización política que use esta palabra. En 2021, el grupo hispano de derechos civiles más antiguo de los EE. UU., la Liga de Ciudadanos Latinoamericanos Unidos, anunció que ya no usaría el término Latinx. 

Pese a la defensa del término latinx en el mundo académico y ser adoptado por los sectores progresistas del partido demócrata, la cruzada de varias corrientes republicanas está llevando crecientes iniciativas que buscan prohibirlo en documentos oficiales, e incluso en Connecticut, las propuestas de ley vienen del ala demócrata

Este término es utilizado principalmente por políticos demócratas, académicos y corporaciones. El uso de la palabra es común entre los latinos más jóvenes y progresistas, pero el hecho de que el 40% de los votantes diga que el término latinx les molesta u ofende, sugiere que los costos potenciales superan los beneficios. 

Por ello, paulatinamente han ido apareciendo en los últimos tiempos figuras demócratas que quieren distanciarse del nuevo vocablo. Una de las figuras con mayor repercusión en el partido, la congresista Alexandria Ocasio Cortez, por contrario, siempre ha sido una firme defensora del término latinx.

AOC criticó la negativa de los demócratas a usar "Latinx" a pesar de la división con respecto al término : "A la gente a veces le gusta hacer mucho drama sobre el término Latinx", dijo, pero señaló que algunos habían usado el símbolo "@" para ser más inclusivos antes que ellos. 

"El género es fluido, el lenguaje es fluido, y creo que la gente en este momento está usando el término ‘e' como género neutral para ser lo más inclusivo posible", añadió AOC quien quiso sentenciar que se hace demasiado drama sobre ello.

Ocasio-Cortez se mostró consciente que a muchos políticos, incluidos los demócratas, les preocupa que usar el término "latinx" y su discurso resuena con mensajes de académicos como Maia Gil, profesora de "Literatura Latinx y Multiétnica" en la Universidad de Boston, quien afirma que "la palabra latino es increíblemente excluyente, tanto para las mujeres como para las personas que no se conforman con el género". "Y el término Latinx es realmente útil por la forma en que desafía esas concepciones", acotó. 

Los resultados de las encuestas indican que el uso del término puede ser contraproducente, ya que el 30% de los votantes hispanos o latinos (24% de los demócratas y 43% de los republicanos) tienen menos probabilidades de apoyar a un político u organización política que use esta palabra

Pese a la defensa del término latinx en el mundo académico y ser adoptado por los sectores progresistas del partido demócrata, la cruzada de varias corrientes republicanas está llevando crecientes iniciativas que buscan prohibirlo en documentos oficiales, e incluso en Connecticut, las propuestas de ley vienen del ala demócrata.

Geraldo Reyes Jr, el representante estatal de Waterbury, patrocinador principal del proyecto de ley de Connecticut y uno de los cinco demócratas hispanos que le pusieron su nombre, dijo que Latinx no era una palabra en español sino un término ofensivo, aclarando que "soy de ascendencia puertorriqueña y lo encuentro ofensivo".