Socialismo

Un intendente socialista amenaza con bajarse de la reelección enojado por la interna partidaria

Alberto Ricci lleva dos períodos al frente de Villa Gobernador Gálvez y ahora evalúa volver a la actividad privada cansado de "los miguelitos".

 El intendente de Villa Gobernador Gálvez, Alberto Ricci, llegó a la política en 2015 de la mano de Miguel Lifschitz, con quien compartía una amistad, y en su primera elección dio el batacazo y se hizo del gobierno municipal. Para ello se apartó de su empresa Ricci Hormigones, con más de 35 años de antigüedad, y hace un tiempo pasó a  manos del grupo Razzini.

Pragmático y directo, Ricci se llevó bien con todo el arco político pero en los últimos meses las disputas interna del socialismo lo pusieron al borde del hastío que lo llevó a evaluar si iba a competir por otro mandato poniendo en riesgo uno de los distritos más importantes para el partido que hace tres años perdió el control del la provincia y de Rosario.

Villa Gobernador Gálvez es la localidad que limita con el sur rosarino, un enclave industrial muy importante con casi 90 mil habitantes, y Ricci junto a Emilio Jatón, de la ciudad de Santa Fe, son los intendentes de mayor peso dentro del socialismo. Sin embargo, Ricci se queja porque no lo consultan.

"Hay tres o cuatro que deciden, no consultan ni informan nada", sostuvo el intendente en diálogo con LPO y agregó "yo voy de frente, no voy por atrás y si me hubieran dicho que estaban dialogando con el gobierno provincial, estaba todo bien pero nadie dijo nada y no me gusta que me agarren de boludo".

 Hay tres o cuatro que deciden, no consultan ni informan nada y yo voy de frente, no voy por atrás y si me hubieran dicho que estaban dialogando con el gobierno provincial, estaba todo bien pero nadie dijo nada y no me gusta que me agarren de boludo

El problema se puso en evidencia con el nombramiento de jueces comunitarios que produjo un terremoto en la oposición. Como publicó este medio, Pullaro acusó al socialismo de haber pactado con Perotti para nombrar funcionarios judiciales y la relación con los socialistas se tensaron al máximo.

Por esa situación, Ricci cuestionó que los dirigentes más encumbrados del socialismo hayan acordado con el peronismo sin consultar y apuntó a "los miguelitos", el sector que estuvo más vinculado a Lifschitz en la gestión, como Joaquín Blanco (diputado provincial), Pablo Farías (presidente de la Cámara de Diputados) y Enrique Estévez (diputado nacional).

 [Javkin armó una mesa con Jatón y Ricci para meterse en la negociación de Juntos y el socialismo]

Según Ricci, los mencionados toman decisiones inconsultas y eso molestó al intendente: "Hay muchos intereses personales por encima de los intereses del pueblo", dijo y admitió que aún no encontró una referencia que lo convenza para la gobernación.

 Pablo (Javkin) arrancó con furor y después no escuché más nada

Además, el ex empresario está disgustado con las idas y vueltas para unificar a la oposición y suele repetir que "si vamos divididos vuelve a ganar el peronismo". De hecho, junto a Javkin y Jatón tuvieron un par de reuniones para crear una mesa de alcaldes y negociar con más fuerza en la oposición pero "Pablo arrancó con furor y después no escuché más nada", dijo sospechando que quizá el intendente de Rosario intente reelegir en la ciudad.

Toda esta situación le hizo replantearse si va a pelear por un tercer período. "Hay que ver las condiciones porque Villa Gobernador Gálvez necesita mucho de Nación y provincia", reflexionó y admitió que en enero definirá qué hacer.

Por lo pronto, empezó a mostrar a Esteban Lenci, un diputado provincial socialista de confianza del intendente y allegado al ex gobernador Antonio Bonfatti.