Santoro se despega de Alberto, en un gesto para acercarse a La Cámpora

Leandro Santoro reveló que hace varios meses que no habla con Alberto Fernández, en una maniobra para tomar distancia del presidente y acercarse a La Cámpora de cara a la definición de candidaturas en la Ciudad de Buenos Aires en 2023, cuando aspira a ir por la Jefatura de Gobierno.

El diputado de origen radical es amigo de Alberto desde hace años y en los papeles está designado como su asesor ad honorem, un cargo que a la luz de sus dichos no estaría pudiendo cumplir.

Santoro quiere ser candidato a jefe de gobierno porteño en 2023 y para eso necesita el apoyo de La Cámpora, por lo que su despegue de Alberto fue interpretado como un gesto para la organización. El diputado ya fue en 2015 el compañero de fórmula de Mariano Recalde, con quien mantiene una buena relación.

Santoro y Lammens asoman como candidatos del Frente de Todos en Ciudad

En una entrevista con Alejandro Fantino, Santoro reveló que no habla con Alberto y también contó que le dolió que nunca lo haya tenido en cuenta para lugares importantes del gobierno.

"Hace tres o cuatro meses que no hablo con él, le escribí la vez pasada y no me contestó. No sé si se enojó, Alberto tiene mil cosas, si le escribo y le insisto, seguro me contesta", contó el legislador del Frente de Todos.

"Siempre ledije contá conmigo para lo que necesites.Faltando diez o quince días para que asuma, me dejó de llamar. Se decía que Santoro iba a ser viceministro, jefe de Gabinete, vicejefe de gabinete", recordó sobre 2019. "Pensé que iba a ser viceministro y no me llamaron", lamentó. 

Santoro recordó que en ese momento habló habló con Aníbal Fernández y éste le recomendó que le directamente a Alberto. "Le mandé un mensaje preguntándole si tenía lugar en el Gobierno, y me respondió diciendo que yo nunca le había pedido nada, y sí, es verdad, ¿pero hay que pedir? Me dijo que hable con Santiago (Cafiero)", relató en Radio Neura. 

"Llamé a Santiago, me dijo, 'uy, nunca nos dijiste nada', y me respondieron, 'bueno te armamos una subsecretaria'. 'Ni en pedo', respondí. Después me buscaron un lugar en el ministerio de Trabajo y dije que no", completó, y remarcó que en ese momento estuvo cien días sin hablar con Alberto.

 "Me dolió que no hayan pensado en mi. Alberto me dijo que no se lo pedí (...) De cualquier manera me jodió que no me hayan tenido en cuenta", finalizó.