Senadores oficialistas y opositores repudiaron el ataque a Cristina y pidieron "paz social"
Los bloques de senadores del Frente de Todos y las fuerzas opositoras acordaron un comunicado conjunto para repudiar el intento de asesinato a Cristina Kirchner, en el que reclamaron buscar la paz social.
El texto fue consensuado por los jefes de las principales bancadas, que se habían retirado tras finalizar la sesión, a las 20.30 horas. Fue el momento en el que la vicepresidenta se dirigió a su domicilio de Recoleta e intentaron dispararle.
El comunicado de los senadores dice: "Los bloques e interbloques del Senado de la Nación expresan su más enérgico repudio al intento de magnicidio a la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner, ocurrido esta noche en la puerta de su domicilio".
"Además, manifestamos nuestra absoluta solidaridad con la señora vicepresidenta y su familia. Y exigimos el pronto y completo esclarecimiento de este hecho lamentable, que empaña la vida en democracia. Exhortamos a la dirigencia toda y a la población a buscar todos los caminos que conduzcan a la paz social".
Los senadores que estaban por la zona retornaron al Senado cuando supieron del ataque a la vice y fueron convocados al salón Arturo Illía, donde emitieron un comunicado. Lo leyó el secretario parlamentario de la Cámara Marcelo Fuentes, mano derecha del Cristina.
Las negociaciones se llevaron a cabo en el despacho del jefe de senadores José Mayans, donde llegaron su vice Anabel Fernández Sagasti, los jefes de la UCR Alfredo Cornejo y Luis Naidenoff; y el del PRO Humberto Schiavoni.
Un brasileño intentó asesinar a Cristina y le gatilló en la cara
En menos de 15 minutos consensuaron el texto y una foto, la primera en forma conjunta entre oficialismo y la oposición tras el intento de asesinato a la vicepresidenta. Fue a las 23.30 y para esa hora los diputados del FdT se acercaron al Senado para convocar a una movilización. La señal del Senado transmitió ambas conferencias.
Cristina había pasado toda la tarde en su despacho, tras retirarse de la sesión para no presenciar el debate sobre los incidentes en su domicilio del sábado. Por la tarde había tenido reuniones en su despacho con legisladores europeos y otra con el titular de YPF Pablo González y directivos de la petrolera malaya Petronas.
Recién con la sesión finalizada, la vicepresidenta se dirigió a su domicilio de Recoleta y cuando se bajó del auto que la trasladó el brasileño Fernando Andres Sabag Montiel intentó dispararle. La imagen se viralizó en los teléfonos de los senadores y los que estaban en el edificio permanecieron.