Los gobernadores reprocharon a Alberto por la medida "inconsulta" del campo y advirtieron que no bajarán el gasto

Catorce mandatarios se habían reunido en el CFI y el presidente los convocó a un almuerzo pero llegaron para la merienda.

Alberto Fernández recibió el reproche de la liga de gobernadores por el bono dolarizado que habilitó el Gobierno para que el campo liquide la cosecha y la falta de rumbo económico.

Catorce gobernadores se habían reunido este miércoles en el Consejo Federal de Inversiones (CFI) del barrio de Retiro, la sede en la que nació la liga que reúne a los mandatarios periódicamente en los últimos meses.

Enterado de esta reunión, el presidente convocó a los gobernadores a un almuerzo a las 14, un horario poco habitual. Pero los gobernadores se acercaron a la Rosada a las 15, casi para la merienda.

El "dólar soja" molestó no sólo al campo sino a los mandatarios que sintieron otra vez que no fueron consultados para una medida de tal envergadura. Por eso en la reunión, que de acuerdo a las fuentes consultadas por LPO tuvo momentos de fuerte tensión, le transmitieron al presidente que los incluya en la toma de decisiones.

Enterado que estaban reunidos en el CFI, Alberto convocó a los gobernadores a un almuerzo a las 14 en la Casa Rosada a las 14, un horario poco habitual. Pero los gobernadores se acercaron a la Rosada recién a las 15, casi para la merienda.

La cumbre improvisada en la Rosada se se dio en medio de las versiones de una reformulación del gabinete y el posible ingreso de Sergio Massa al Ejecutivo.

Encabezados por el santiagueño Gerardo Zamora, que como anticipó LPO es la voz cantante de la "liga", al CFI asistieron Axel Kicillof, Jorge Capitanich, Omar Perotti, Sergio Uñac, Osvaldo Jaldo, Gustavo Bordet, Gildo Insfrán, Alicia Kirchner, Raúl Jalil, Gustavo Melella, Mariano Arcioni, Jorge Zilliotto y Alberto Rodriguez Saá.

Los gobernadores creen que si la crisis se agrava pueden perder en sus provincias y empujan el diálogo de Alberto y Cristina 

Los gobernadores esperaban aprovechar el viaje a Buenos Aires para reunirse con Silvina Batakis, pero la ministra de Economía, que iba a regresar de Washington en la mañana de este miércoles, postergó su vuelta para el jueves.

Los mandatarios querían advertirle a la ministra, que le prometió un ajuste fiscal al FMI, que no van a resignar un peso de los subsidios al transporte ni de las obras comprometidas en las provincias, dos de los ejes con los que se armó la liga del CFI. Se lo terminaron advirtiendo a Alberto.