Biden

Con la aprobación de la gestión Biden en mínimos, sería inevitable que los demócratas pierdan ambas cámaras

Según una investigación de Gallup a la que accedió LPO, los partidos de presidentes "impopulares" siempre han perdido escaños en las elecciones intermedias. El antecedente: Trump con la mismos números que hoy tiene Biden, perdió 40 escaños en la Cámara y el control de la misma.

 La alicaída popularidad presidencial, algo que el propio Joe Biden está intentando remontar sin demasiado éxito, condena la suerte del Partido Demócrata para las elecciones de noviembre. La performance del partido gobernante con un nivel de aceptación en torno al 40% suele ser siempre negativa y la historia política desde al menos los '50 así lo demuestra.

"El bajo índice de aprobación de la gestión Biden representa una amenaza significativa para las posibilidades del Partido Demócrata de mantener sus escasas mayorías en la Cámara de Representantes y el Senado de los Estados Unidos", afirma la última investigación de Gallup, a la que tuvo acceso LPO.

Otra pesadilla electoral para Biden: sube el costo de las hipotecas y acceder a una vivienda es 72% más caro 

Por lo general, los partidos de presidentes "impopulares" han perdido escaños en las elecciones intermedias, y la cantidad de esos escaños perdidos suele ser mucho mayor para los presidentes con índices de aprobación por debajo del 50%. Actualmente Biden, según Gallup, ostenta 41,3%. 

Tal como están las cosas, dado el fuerte vínculo entre los índices de aprobación presidencial y el desempeño del partido del presidente en las elecciones intermedias, es probable que Biden gobierne con mayorías republicanas en una o ambas cámaras del Congreso el próximo año, a menos que su calificación mejore drásticamente

La firma dice que si bien es posible que la aprobación de la gestión Biden aumente entre ahora y las elecciones de otoño, hacerlo iría en contra del patrón histórico para los presidentes en su segundo año. Hasta ahora, solo un presidente (Donald Trump) vio mejoras en los índices de aprobación entre el quinto y el séptimo trimestre en el cargo (que termina el 19 de octubre, pocas semanas antes de las elecciones intermedias).

En el caso de Trump, la aprobación de su gestión aumentó solo marginalmente, del 39% al 41%, y no lo suficiente como para alterar la dinámica de las elecciones en la que los republicanos perdieron 40 escaños en la Cámara y el control de esa cámara.

El ex presidente Barack Obama tampoco pudo revertir las elecciones de mitad de término en 2010 con su bajo nivel de aprobación

Ni Barack Obama, en su primer mandato, pudo repuntar antes de sus elecciones de mitad de término. Claro, partía de un índice mayor. Tenía una aprobación de casi el 49% y cayó cuatro puntos para las elecciones. En ese momento, los republicanos ganaron el Senado pero no pudieron tener mayoría en la Cámara de Representantes.

"Las perspectivas de una mejora significativa en los índices de aprobación de Biden antes de las elecciones intermedias de otoño parecen sombrías, no solo por el récord histórico de los presidentes durante su segundo año, sino porque sus índices de aprobación se han estancado en los bajos 40 durante ocho meses", advierte Gallup. 

Por lo general, los partidos de presidentes 'impopulares' han perdido escaños en las elecciones intermedias, y la cantidad de esos escaños perdidos suele ser mucho mayor para los presidentes con índices de aprobación por debajo del 50%. Actualmente Biden, según Gallup, ostenta 41,3%

Incluso, si mejoran, tendrían que hacerlo por al menos 10 puntos para estar en el rango del 50%, históricamente asociado con el partido del presidente para evitar grandes pérdidas de escaños.

"Tal como están las cosas, dado el fuerte vínculo entre los índices de aprobación presidencial y el desempeño del partido del presidente en las elecciones intermedias, es probable que Biden gobierne con mayorías republicanas en una o ambas cámaras del Congreso el próximo año, a menos que su calificación mejore drásticamente", asegura la firma.

La única forma en que los números de Biden podrían mejorar es que recupere el apoyo que ha perdido entre los principales electorados demócratas, como los adultos jóvenes, negros e hispanos. Biden también necesitaría mejorar su posición entre los independientes con la esperanza de persuadirlos de votar por candidatos demócratas en lugar de republicanos al Congreso en las elecciones de este otoño.