Sindicatos

Schultz invita a los sindicalistas a que se vayan de Starbucks, desplaza a su jefa de abogados y avanza en una ofensiva con despidos

El CEO histórico de la tienda de café chocó con un empleado en un encuentro en Long Beach, California. Otra candidata a delegada fue despedida en Carolina del Norte. Los cambios también afectan a los directivos.

 Acertada o no, eso se verá, pero Starbucks ya tiene una política definida. Frente a la nueva ola de sindicalización que se advierte en las grandes empresas de Estados Unidos a la salida de la pandemia, el gigante de café decidió salir a dar batalla. Con su CEO histórico, Howard Schultz, otra vez al mando, inició una etapa de mayor intransigencia frente a las demandas de trabajadores que han logrado sindicalizarse en por lo menos 15 almacenes y buscan hacer lo mismo en otros 185, a lo largo de todo el país.

Los hechos se precipitaron en las últimas dos semanas en coincidencia con la creación del primer sindicato de Amazon en Staten Island, Nueva York, y tuvieron a Schultz como cara visible de un conflicto que escala todos los días. Apenas asumió sus funciones, el CEO de Starbucks comenzó a organizar encuentros con los empleados de la empresa y a darles un mensaje frontal de rechazo a la organización sindical. El viernes pasado, en una de las últimas reuniones, en Long Beach, California, Schultz fue más directo que nunca. 

Ante las preguntas de Madison Hall, un barista de 25 años que cuestionaba la política de la compañía frente a los reclamos sindicales, Schultz perdió la calama y puso blanco sobre negro: "Si odias tanto a a Starbucks, ¿por qué no vas a trabajar a algun otro lugar?", le dijo.

La invitación al encuentro, del que participaron alrededor de 20 empleados de distintos almacenes, había sido presentada como una oportunidad de reunirse con la alta dirección de la firma, pero resultó en una confrontación que ilustra el momento que se vive puertas adentro de la empresa.

Todo comenzó cuando el barista Hall aprovechó una de las preguntas de la empresa, acerca de cómo reconstruir la confianza entre la gerencia y los trabajadores, para escribir: "Firme los Principios de elecciones justas y sea honesto y transparente sobre lo que les sucede a los trabajadores sindicalizados en todo el país". Más adelante, Hall buscó incorporar el tema a la discusión grupal sobre honestidad y transparencia y Schultz se negó a comentar.

La tensión entre la compañía y los empleados que quieren sindicalizarse coincide con el periodo de elección de autoridades para los sindicatos en distintas ciudades de Estados Unidos y con el proceso que experimentan otras grandes empresas como Amazon y LPO viene relatando. 

Efecto contagio: después del apoyo de Biden, otro almacén busca sindicalizarse en Amazon

El movimiento sindical más importante de las últimas cuatro décadas tiene por lo menos dos particularidades: se da en coincidencia con altas tasas de empleo e inflación y sus principales protagonistas son jóvenes latinos y afroamericanos.

Hace 10 días, una de las despedidas por motivos gremiales fue Laila Dalton, una barista de 19 años que impulsaba la sindicalización en Phoenix, Arizona. El viernes pasado, Starbucks elevó los decibeles del conflicto cuando despidió a Sharon Gilman, una joven empleada de 20 años, que esta semana iba a ser candidata en las elecciones de su almacén en Carolina del Norte. En algunos casos, además, según denunció laagencia National Labor Relations Board, Starbucks decidió prohibir la cobertura mediática de las elecciones sindicales.

Los movimientos en la tienda de café que cuenta con 28.000 locales distribuidos en 77 países se dan en todos los niveles. No solo Starbucks recuperó a Schultz, el CEO histórico que había comandado la empresa en dos etapas previas, de 1986 hasta 2000 y desde 2008 hasta 2017. Además, la semana pasada, decidió destituir de su cargo a su jefa de abogados y consejera general de Starbucks Corp., Rachel González, que desempeñaba una función estratégica desde 2018. Según publicó la agencia Bloomberg, González cobró por sus honorarios nada menos que 5,3 millones de dólares durante 2021 y recibirá ahora pagos compensatorios por 8 millones de dólares. La jefa de abogados fue la encargada de vender acciones de la empresa por 9 millones de dólares durante el año pasado, una política que el nuevo CEO decidió abandonar apenas asumió su cargo.

Ahora, la tienda de café busca una directora y asesora corporativa laboral que podría asumir parte de sus funciones. Entre los requisitos para asumir el cargo, la empresa pide "experiencia en planificación ante la contingencia de huelgas"