El PRO se fue del recinto cuando Alberto criticó a Macri por la deuda, pero la UCR se quedó

Juntos por el Cambio exhibió en la apertura de sesiones la división que ya mostró respecto a la posición a tomar en el acuerdo con el FMI: los legisladores del PRO se fueron cuando Alberto Fernández cuestionó a Mauricio Macri por tomar ese crédito, pero los UCR y la Coalición Cívica se quedaron.

La reacción de los conducidos por el senador Humberto Schiavoni y el diputado Cristian Ritondo llegó cuando Alberto recordó que hace un año ordenó al procurador del Tesoro, Carlos Zannini, presentarse como querellante en una causa que investiga el destino del crédito. 

El Presidente aclaró que el acuerdo con el FMI que negocia "tampoco releva al Poder Judicial de avanzar en esa investigación. Los argentinos y las argentinas tienen el derecho de saber como ocurrieron los hechos y quienes fueron los responsables de tanto desatino", señaló. 

Morales se pliega a Carrió y pide que Juntos no trabe el acuerdo con el FMI

Y mientras se ganaba los aplausos del oficialismo, Ritondo le ordenó a sus dirigidos abandonar el recinto. Los primeros en seguirlo fueron Fernando Iglesias y Waldo Wolff, integrantes del ala dura del macrismo y cercanos a Patricia Bullrich, pero luego lo acompañó el resto de la bancada, incluidos moderados como Rogelio Frigerio, que no habría compartido del todo una decisión que pareció preparada. 

La salida del recinto la ordenó Cristian Ritondo y los primeros en obedecerla fueron los macristas duros Iglesias y Wolff, pero luego la acompañaron todos los integrantes del bloque, incluidos moderados como Frigerio. La puesta en escena incluso fue compartida por Rodríguez Larreta que dejó el palco desde donde seguía la sesión.

También se fue el jefe de Gobierno, Horacio Rodríguez Larreta, que estaba en el palco de gobernadores ubicado en el recinto. Pero se quedaron los radicales, después de intercambiar miradas con el gobernador de Jujuy, Gerardo Morales, quien en enero admitió que nunca estuvo de acuerdo con el endeudamiento ante al FMI, pero respaldó el entendimiento para reprogramar la deuda que alcanzó Martín Guzmán. 

Los jefes de bloque Mario Negri y Alfredo Cornejo ordenaron a sus dirigidos mantenerse en sus bancas, no sin antes hacer algo de show: "No tenes los votos para aprobar el acuerdo con el FMI", le gritó el mendocino a Alberto, quien recién reaccionó cuando Cornejo acompañó esa acusación con un "mentiroso". 

"No Alfredo, yo no miento", se defendió el jefe de Estado. El radical Miguel Bazze también se levantó para reprender al presidente. Pero ningún radical se fue del recinto con el PRO y entre los que se quedaron estuvo Maximiliano Ferraro, de la Coalición Cívica, cuya jefa Elisa Carrió quiere aprobar el acuerdo con el FMI ni bien lo envíen y hasta presentaron una ley para evitarle al Presidente la consulta al Congreso. 

Levantarnos del recinto fue un gesto. No queremos perder más tiempo. Presenten un plan económico, den señales de que saben lo que hacen. Dejen de echar culpas y asuman de una vez que son el gobierno que más rápido endeudó al país.

A través de un comunicado, los legisladores del PRO justificaron su decisión en "el relato mentiroso y sesgado sobre la deuda pública en Argentina que desconoce la deuda que heredó el ex presidente Macri de las administraciones kirchneristas y las generadas por esta gestión (que ya acumula 65 mil millones de dólares incluyendo la deuda del BCRA)".

Ritondo lo amplió en Twitter: "Levantarnos del recinto fue un gesto. No queremos perder más tiempo. Presenten un plan económico, den señales de que saben lo que hacen. Dejen de echar culpas y asuman de una vez que son el gobierno que más rápido endeudó al país".