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Domínguez ratificó su apoyo al trigo transgénico y cruzó a la Mesa de Enlace

El ministro aseguró que "hay que apoyar la investigación y el desarrollo nacional". Las entidades rurales quieren prohibirlo hasta que lo apruebe Brasil.

El ministro de Agricultura, Julián Domínguez, salió por primera vez a sentar posición respecto al trigo transgénico (HB4). "Lo que es soberanía tecnológica, lo que es investigación y desarrollo nacional, si no lo defendemos nosotros, quién lo va a defender?", se preguntó el funcionario.

"Creo en la biotecnología y en el HB4 que es tan discutido. Yo inicié ese proyecto; lo alenté siendo ministro. Lo voy a sostener a capa y espada", aseguró Domínguez en el marco de una conferencia de prensa en la sede del Ministerio de Agricultura al término de la reunión con la Mesa de Enlace.

Respecto al rechazo de la molinería y la industria alimenticia brasileña, Domínguez se plantó: "A ver si los brasileños me van a indicar a mí lo que tengo que hacer con la producción argentina?", señaló el ministro en un claro respaldo a la firma de capitales nacionales, Bioceres.

La semana pasada, tal como adelantó LPO, las cuatro entidades habían salido a marcar posición en un intento de meterle presión a Domínguez. "Cuesta entender la razón de autorizar semejante volumen de producción de trigo (HB4) que legalmente no puede comercializarse", señalaron.

Cabe mencionar que se detectaron más de 50.000 hectáreas sembradas con trigo HB4 en todo el país. Este desarrollo biotecnológico fue aprobado por decreto por el Gobierno nacional en octubre del año pasado tras varios años de polémicas y fuertes debates internos en el campo.

La Mesa de Enlace presiona a Domínguez para vetar el trigo transgénico 

"Tan elevado nivel de producción hace realmente imposible su contralor por las autoridades oficiales, razón por la cual será inevitable que se genere un proceso de contaminación de los trigos no modificados genéticamente", advirtieron la Sociedad Rural, Federación Agraria, CRA y Coninagro.

Las entidades rurales vienen haciendo lobby para vetar dicho desarrollo tecnológico. Los principales opositores al trigo transgénico son el ex ministro Luis Miguel Etchevehere y su mano derecha Santiago del Solar (ambos se mostraron muy activos en redes sociales y grupos de Whats App).

La cosecha argentina de trigo ronda las 20 millones de toneladas. Se estima que, mediante la aprobación del HB4, podría crecer la producción y, por ende, las exportaciones que se ubican en torno a las 12 millones de toneladas por año que representan más de u$s 3000 millones por año.

El problema que plantean algunos integrantes de la cadena triguera es que en el mundo hay otros compradores de trigo argentino que aún mantienen prohibido dicho desarrollo biotecnológico por objeciones referentes a la salud y al consumo humano.

Un aspecto no menor es que los funcionarios del Gobierno y los directivos de Bioceres ya iniciaron el año pasado los trámites tendientes a aprobar los protocolos del trigo tolerante a sequía en países como Estados Unidos, Uruguay, Paraguay y Bolivia, entre otros.