Tucumán

Guzmán confirmó que pisará el dólar y cayeron los futuros

Es para que baje la inflación. Hasta ahora, la pauta de depreciación del tipo de cambio nominal seguía a los precios, y fue en promedio del 41% en 2020.

En su paso por la Universidad Nacional de Tucumán el día martes, el ministro de Economía confirmó un secreto a voces en el mercado. Este año, el Banco Central va a pisar ligeramente el dólar. Ya no seguirá el ritmo inflacionario sino que irá ligeramente por debajo, sino que será del 25% anual e incluso más baja en febrero.

En este sentido, el ministro explicó que esta depreciación anual es consistente con el objetivo de reducción de inflación de alrededor de 5 puntos porcentuales desde los 36,1 puntos porcentuales que acumuló en 2020 y que fue en promedio del 41% interanual a lo largo de 2020. De hecho, la pauta de la Ley de Presupuesto habla de una proyección del 29% y difiere sustancialmente del 50% que pronostica el mercado en función de la aceleración de los últimos meses.

Sin embargo, para Guzmán "En los últimos meses del año se experimentó una dinámica que no debe tomarse como representativa sobre qué esperar en 2021", sino que es más relevante coordinar expectativas para que todos los precios de la economía, incluidos los salarios, tengan horizontes se subas menores. Por eso este miércoles comenzó las negociaciones con los sindicatos con una pauta modesta de un aumento de entre dos y cuatro puntos por encima de la inflación.

El Gobierno prometió paritarias de hasta 4 puntos sobre la inflación

"La inflación la atacamos de forma integral, se usan múltiples instrumentos de política económica. La inflación es un fenómeno multicausal. Buscamos que la inflación se vaya reduciendo 5 puntos porcentuales, aproximadamente, año a año. Esto es factible macroeconómicamente. Requiere complementar con políticas de precios e ingresos que son necesarias para coordinar expectativas. Se van a usar en 2021 como parte de un esquema integral para atacar el problema de la inflación. Es un compromiso de nuestro gobierno reducir la inflación año a año", dijo en su paso por Tucumán ayer.

En su exposición, Guzmán aseguró que: "Tenemos un objetivo de tipo de cambio de fin de año, un tipo de cambio de referencia, con un promedio de $102,40 en el mes de diciembre. Eso lo que implica es una pauta de depreciación del tipo de cambio nominal, a lo largo de todo el año, de alrededor del 25%. En el contexto en el que estábamos viviendo, donde había una concentración de la inflación de 2020 en el último trimestre del año y la del 2021 en los primeros meses del año, decidimos que la tasa de velocidad de la depreciación fuese más alta al principio del año, por eso en enero la tasa de depreciación fue de 3,7% mensual".

Sin embargo, aclaró que "Sería un error extrapolar eso para todo el año. No es que la tasa de depreciación vaya a ser así mes a mes. Incluso en febrero va a ser más baja. La depreciación anual del 25% es consistente con el objetivo de reducción de inflación de alrededor de 5 puntos porcentuales".

No es que la tasa de depreciación vaya a ser así mes a mes. Incluso en febrero va a ser más baja. La depreciación anual del 25% es consistente con el objetivo de reducción de inflación de alrededor de 5 puntos porcentuales

Lo más destacable es que, esta vez, el mercado le dio la derecha al ministro y ajustó parcialmente las cotizaciones del dólar futuro teniendo en consideración el rumbo fijado por Martín Guzmán. Durante varios meses el año pasado el mercado le apostó en contra el Banco Central en el mercado de futuros y el resultado fue que el Central tuvo ganancias millonarias porque la devaluación esperada jamás se concretó.

El ajuste se operó en buena medida ayer cuando en Rofex las coberturas más cortas se abarataron un 0,3% y el dólar a julio perdió 1%; y también en la rueda de hoy en la que las subas fueran pocas e inferiores al 0,1% para todos los plazos, lo que contrasta con la suba del oficial.

Sin embargo, las dudas sobre el timing de la liquidación de la cosecha siguen aportando incertidumbre al mercado de cambios y a las coberturas a futuro.

"El mercado de futuros siempre es muy sensible a la brecha cambiaria. Y la perdida que se vio en los futuros tuvo dos protagonistas claves, por un lado la estabilidad del contado con liquidación y el dólar bolsa; y por otro, la elevada tasa de depreciación implícita en esos futuros con la expectativa de un salto cambiario durante el verano que no sucedió. El Banco Central evitó vender futuros de mediano plazo (3 a 6 meses) en octubre y noviembre y se concentró en el vencimiento más corto, dejando que mercado pagara un alto precio de expectativa de devaluación", explicó a LPO Mauro Mazza, economista y analista de Bullmarket.

"Los que conocen el mercado de cambio sabían que diciembre y enero serian estable por la liquidación del trigo, que dura hasta mediados de febrero, y que el stress se concentraba hacia finales de febrero y todo marzo en espera de la cosecha gruesa. Ahora llegamos a un momento clave para el dólar oficial sin generación de expectativas de salto cambiario. Tampoco nosotros creemos que pase. Pero si la cosecha de maíz tarda mucho en aparecer hacia finales de marzo o la liquidación de soja no es tan alta como se espera, podría pasarle factura al Banco Central, por lo que somos cautelosos y creemos que la brecha cambiaria se volverá a descontrolar en las próximas semanas", agregó Mazza.