Punto por punto las dudas del regreso a clases en la Ciudad
La vuelta a clases en la Ciudad parece más complicada que lo anunciado este jueves por el gobierno porteño. Especialistas en Educación se preguntan cómo hará la Ciudad para reemplazar al 20% de los docentes que son personas de riesgo o cómo encarar las dificultades estructurales que tiene una de cada cinco escuelas capitalinas.
"Anunciaron un plan para todos los niveles, pero parece solo inspirado en las escuelas primarias, donde un solo maestro está el frente de un curso, la realidad de la Ciudad es muy diferente en los secundarios o tericiarios", explicó a LPO un especialista en Educación que trabaja tanto en el distrito capitalino como en la Universidad de Buenos Aires. En los colegios secundarios distintos docentes dictan distintas materias y eso provoca una rotación mayor.
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Según dijeron a este sitio desde el gobierno porteño al menos 100 escuelas tienen condiciones estructurales que impiden las clases presenciales: falta de una ventilación adecuada o aulas que no permiten la distancia social necesaria. Esas instituciones deberán presentar un plan que mezcle virtualidad y presencialidad en tan solo 9 días corridos desde la vuelta al trabajo el 8 de febrero y el inicio del ciclo lectivo previsto para el 17.
Además aproximadamente el 20% de los docentes tiene cormorbilidades y por eso entra dentro del personal de riesgo. Para reemplazar a estos maestros el gobierno debe llamar a un acto público, un trámite que puede llevar días o semanas, dependiendo de la cantidad de postulantes que se presenten.
La movilidad es otro de los problemas que el gobierno abordó a medias en su presentación. Juan José Méndez propuso que los alumnos se muevan en bicicleta o que tengan prioridad a la hora de utilizar el transporte público, soluciones que no alcanzan a resolver el problema de fondo que existe en el distrito.
"La bicicleta solo le serviría a un alumno que vive cerca del colegio y si vive cerca puede ir caminando. Pero en la Ciudad muchos de los alumnos viven lejos de sus escuelas y eso implica utilizar el transporte público que no está preparado para recibir un millón de personas en medio de la pandemia", le dijo a LPO una fuente del mundo educativo. De hecho, los metrodelegados ya anticiparon su rechazo a la sobrecarga de pasajeros que abrir las escuelas representaría en el Subte.
La idea que expuso Soledad Acuña para poder tener la distancia social en el aula tampoco fue muy bienvenida. "El planteo de que el docente se pare en la puerta de un aula y les de clases a los chicos que están en el pasillo y en el aula al mismo tiempo es de una persona que no dio clase nunca en su vida. Estar al frente de un curso no tiene nada que ver con eso", explicó Gustavo Romero, docente y especialista en Educación.
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La falta de insumos en las escuelas es otro de los frentes que deberá resolver la Ciudad. Durante 2020 en varias instituciones no contaron con alcohol en gel para los trabajadores que repartían comida a las familias de los alumnos y ahora deberán tener una cantidad suficiente para una demanda mayor.
En la "vieja normalidad" el faltante de jabón o toallas de papel era casi una constante en muchas escuelas, mientras que en otras hubo días sin provisión de agua. "Es lamentablemente habitual que la dirección o los docentes de una escuela pongan plata de su bolsillo para comprar jabón o lo que sea, pero en medio de una pandemia donde los chicos tienen que lavarse las manos varias veces por día eso es imposible", agregó Romero.
"Las realidades de las escuelas son muy distintas. En la zona norte hay vacantes porque muchos alumnos van a escuelas privadas. Por eso un colegio público de Palermo tiene doble escolaridad y la posibilidad de dividir en dos a sus alumnos, en el sur eso es imposible", comentó.
La limpieza de los espacios es otra tarea compleja en épocas de Covid. Algunas escuelas tienen hasta tres turnos de alumnos y no es lo mismo barrer un aula o vaciar los tachos de basura que tener que desinfectar cada pupitre, una tarea que requiere mayor cantidad de ordenanzas y mayor presupuesto.
"Se toma como ejemplo a las escuelas de Europa en donde esos problemas no existen, y la realidad es muy diferente. Y el planteo de ‘cada escuela sabe lo que necesita' es muy perverso. Porque la dejan sola y no bajan los recursos", completó el maestro.
"Son anuncios que no tienen detrás una gestión, un análisis o fundamentos estadísticos", dijo el educador Manuel Becerra. "Deberían tener definiciones claras de cómo se van a llevar adelante el archivo de Word que difundieron", explicó en FM La Patriada. "Todos queremos volver a la escuela, pero necesitamos tener seguridades en algunas cosas".
Tampoco quedó claro qué ocurrirá en caso de que se detecte un caso de Covid en una escuela. El concepto de "burbuja" explicado por Soledad Acuña es muy diferente a lo que los epidemiólogos denominan burbuja: según el plan de la Ciudad un maestro podrá tener a cargo más de un curso. La ministra dijo que se suspendería el curso que tenga un contagio comprobado, pero no es el criterio que el mismo gobierno de la Ciudad aplica en las colonias de vacaciones.