Decepción en Brasil: la vacuna china Coronavac sólo asegura un 50 por ciento de inmunidad
El Instituto Butantan de San Pablo reveló este martes que la vacuna Coronavac de China que se produce en San Pablo alcanzó una afectividad de apenas el 50,38 por ciento, un número lejísimos de competidoras como Pfizer, Moderna y la rusa Sputnik, que arrojan coberturas superiores al 90 por ciento.
La información fue anticipada por el diario paulista Folha y confirmada por la Agencia Nacional de Vigilancia Sanitaria de Brasil (Anvisa) en el marco de la solicitud de registro de emergencia de la vacuna.
Los científicos presentes en el anuncio consideraron que el bajo número de efectividad no debe ser preocupante y destacaron la importancia de una vacuna segura y disponible en el país. "Es una vacuna que no traería malas sorpresas y los resultados presentados lo corroboran. Es una plataforma segura ", dijo el infectólogo pediátrico Marco Aurélio Sáfadi, presidente del Departamento de Inmunización de la Sociedad de Pediatría de São Paulo (SPSP), también presente en el anuncio.
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La vacuna desarrollada por el laboratorio chino Sinovac se probó en un grupo de 12.508 participantes voluntarios en el estudio dirigido por Butantan, todos profesionales de la salud mayores de 18 años que trabajan con pacientes con Covid-19. Debido a que están en contacto con los enfermos, estos voluntarios se encuentran entre las personas que corren mayor riesgo de tener contacto con el virus e infectarse.
En total, se reclutó a más de 13.000 personas para el estudio. Los datos de efectividad publicados este martes (12) tienen información de 9.242 de estos voluntarios. Durante el juicio, que comenzó en julio, 252 personas resultaron infectadas. De estos, 167 habían recibido placebo y 85, Coronavac. El estudio no evaluó el número de voluntarios asintomáticos, que pueden haberse infectado con el virus sin desarrollar ningún síntoma. Las estimaciones de los científicos indican que los pacientes asintomáticos pueden ser más del 50% del total infectado con Sars-CoV-2, pero la ausencia de manifestaciones clínicas dificulta el diagnóstico.
El presidente de Anvisa, Antonio Barra Torres.
La vacuna china en Brasil se convirtió en un capítulo más de la disputa política entre el presidente, Jair Bolsonaro, y el gobernador de San Pablo y posible candidato en las elecciones de 2022, Joao Doria quien hace unos días había confirmado que la efectividad estaría en el orden del 78 por ciento.
La Casa Rosada tiene expectativa en esta vacuna debido a que se convirtió en el plan alternativo ante las demoras de AstraZeneca. El propio canciller, Felipe Solá, viajó a San Pablo para reunirse con los integrantes del Instituto Butantán. Al mismo tiempo, el gobierno gestiona la primera tanda de la otra vacuna china, la Sinopharm, que se haría efectiva el 20 de enero con un millón de dosis.