Senado

Acuerdo en el Senado para prorrogar hasta 2024 la promoción de los biocombustibles

Se aprobó la ley para extender los cortes con biodiesel, el bioetanol y el biogas. Estudian otra norma integral para aumentar la producción y hacerla más sustentable.

La Cámara de Senadores aprobó por unanimidad este viernes la prórroga hasta diciembre de 2024 del régimen de promoción de la industria de los biocombustibles, que está vigente desde 2006 y apunta a que reemplacen en forma paulatina a los fósiles.

Lo promueve mediante porcentajes mínimos de "mezcla" de las variantes vegetales sobre el total de los combustibles que se comercializan. Las principales son el bioetanol, biodiesel y biogás, producidas con materias primas de origen agropecuario, agroindustrial o desechos orgánicos.

La ley fue aprobada por unanimidad, pero senadores de todos los bloques reclamaron diseñar una norma integral y actualizada, algunos para aumentar la producción y evitar importaciones de combustibles y otros para garantizar que sea sustentable y aporte al combate contra el cambio climático.

La prórroga había sido promovida por la oficialista María de los Ángeles Sacnun, oriunda de Santa Fe, la provincia con mayor producción de biodiesel. Aceleró los tiempos la aprobación de ley de etiquetado frontal, que provocó una fuerte reacción de la industria azucarera, proveedora también de la industria del bioetanol.

"La producción de alcohol en los pequeños y medianos cañeros sería insostenible sin el bioetanol", sostuvo la tucumana Beatriz Mirkin, del Frente de Todos. Junto a la radical Silvia Elías de Pérez, este jueves se resistieron en soledad al etiquetado. El ex canciller Jorge Taiana destacó la necesidad de mejorar condiciones para competir con los cañeros de Brasil. 

Sacnun aclaró que la industria de los biocombustibles "no está subsidiada sino regulada y desde hace varios años viene sufriendo precios y políticas que la perjudican, poniendo en vilo los miles de puestos de trabajo directos e indirectos, que ésta genera".

Sólo en Santa Fe, señaló, aporta 570 mil toneladas anuales del millón 70 mil que se requiere en el corte interno. Y de ese total, el 41 por ciento lo hacen las pequeñas plantas, casi 30% de las medianas y el 29% las  integradas, con una facturación de 400 millones de dólares. "Y entre los 300 mil puestos de trabajo, directos e indirectos que genera el sector, 1.080 empleos directos y 5400 indirectos, representan a mi provincia", se jactó Sacnun. 

"No podemos volver a proponer un sistema de reprimarización de la economía y será necesario un gran acuerdo de los sectores económicos y sociales, de las provincias y sus economías regionales para que verdaderamente abordemos la problemática de los biocombustibles ya que son la herramienta estratégica de desarrollo, de empleo, de federalismo y de arraigo", exigió la santafesina.

Inició así un debate sobre si la ley de 2006 está a la altura de los desafíos que vienen, por las necesidades de eliminar con mayor velocidad los fósiles para que no continúen calentando el plantea. Su coterráneo Roberto Mirabella explicó que los límites al corte de mezcla establecidos por el gobierno de turno y la abultada exportación de aceite le quitan potencial al sector. "Además de prorrogar la ley, necesitamos un plan nacional que otorgue un marco adecuado, para sustituir la importación de gasoil con biodiesel nacional", reclamó.

El impacto ambiental cobró importancia para lo que viene. El cordobés Carlos Caserio, del oficialismo, hizo hincapié en que el 70% del maíz se compone de almidón y no sirve como proteína, pero si a la producción de biogás, que ayuda a reducir calentamiento global. "Hay una sustitución de importaciones significativa que nos permite usar menos petróleo".

Gladys González, del PRO, presidenta de la comisión de Ambiente y Desarrollo Sustentable, destacó la promoción de Mauricio Macri a las energías renovables, pero reclamó una revisión de lo hecho hasta ahora para ir por más.  

"Pasaron 15 años y hubiera sido necesario hacer un balance. Hay un compromiso de combatir el cambio climático y sería una contradicción que estemos produciendo con externalidades negativas. No digo que sea así, pero hubiera hecho falta un análisis", sugirió. Anticipó que comenzará a promover transformaciones como la producción de autos eléctricos. 

Alfredo De Angeli, del PRO, pidió bajar las retenciones y la presión impositiva nacional y provincial. "El Estado es socio en el 66% de la soja, del 52.9 del maíz, del 57% del trigo y del 56% del maíz. La caña de azúcar tiene un 30% de impuestos. Esta carga nos hace salir de la competencia. La idea de  Macri es que no debe haber retenciones, más allá que al final volvieron".