Vuelve al gremio el sindicalista que se enfrentó a Macri por los negocios del puerto
Luego de una larga intervención que pesaba sobre el Sindicato Unidos Portuarios Argentinos de Puerto General San Martín tras la investigación judicial que se inició durante el gobierno de Mauricio Macri, la Sala IV de la Cámara Nacional de Apelaciones del Trabajo ha dejado sin efecto la medida cautelar y habilitó a su histórico líder Herme Juárez a volver a ocupar la secretaría general.
"Al revocar la coacción agravada que era el único delito que pesaba sobre Herme en relación al SUPA, se deja sin efectos la intervención y ahora, el Ministerio de Trabajo tiene que entregar el certificado de autoridades hasta octubre de 2021 cuando finalizaba su mandato", explicó a LPO su abogado Javier Rabade.
A su vez, la decisión judicial haría caer el llamado a elecciones para elegir nuevas autoridades que era impulsada por el sector Celeste y Blanco, opositores a Juárez, cuyo líder es el estibador Marcelo Vergara, un pastor evangélico que a su vez cuenta con el respaldo de los diputados provinciales del bloque Somos Vida, una coalición de evangelistas y católicos que ingresaron con la lista de Amalia Granata y después se separaron.
El grupo de Vergara organizó actos de repudio en los dos intentos que hizo Juárez para volver a la sede gremial luego de obtener la libertad: "era un grupo minoritario que para mantener la paz social Herme no insistió y esperó a que la justicia se expida con este fallo que es para celebrar", consideró su representante legal.
El otro tema que sigue en discusión es sobre el destino que tendrá la intervención del Ejecutivo a la Cooperativa Portuaria de Puerto General San Martín, una de las asociaciones de trabajadores más importante del mundo que presta servicios en las terminales agroexportadora, un negocio multimillonario que creó en la década del 70 Juárez.
Desde el entorno del sindicalista afirmaron que actualmente la Cooperativa está paralizada y acusaron a la intervención de haberla dejado caer para beneficiar a las empresas privadas del sector vinculadas a las grandes agroexportadoras en detrimento de los trabajadores.
"Desde que empezó la causa, no para de perder trabajos y posiciones en el mercado", sostuvo Rabade quien detalló que el impresionante centro de maquinarias Volvo, con tecnología de último modelo hoy prácticamente es un cementerio de equipos.
"Ni siquiera se les hizo el mantenimiento mínimo", se lamentó el abogado. En el inventario figuran dos helicópteros sanitarios de última generación para socorrer en caso de accidentes en los buques de carga.
Pero dependerá del futuro que le depare la causa judicial que aún compromete a Juárez sobre malversación de fondos y lavados de activos a través de la Cooperativa y que recayó en el juzgado federal de Rosario de Marcelo Bailaque: "dijeron que faltó dinero pero todavía no se hizo la pericia contable", concluyó el letrado del gremialista.