Quirós admite que la situación en los bares "no fue buena" y la oposición pide más control
El ministro de Salud porteño, Fernán Quirós, reconoció hoy que "lo que pasó el primer día no fue bueno", en referencia a las imágenes que se vieron en varios barrios porteños, donde hubo gente abarrotada en la puerta de los bares, muchos de los cuales vendieron alcohol fuera de los horarios autorizados. Desde la oposición pidieron mayores controles.
Las aglomeraciones en bares porteños fueron una postal repetida en muchos barrios capitalinos. El mismo ministro de Salud admitió que "no fue bueno" lo sucedido, pero se mostró esperanzado con que la situación se ordene y lo comparó con la experiencia de los deportes individuales al aire libre.
El gobierno porteño clausuró 12 bares que no cumplieron los protocolos
"Se entiende que haya gente que tenga necesidad de salir, pero necesitamos hacerlo como corresponde", agregó Quirós. La Ciudad clausuró 12 bares por haber incumplido los protocolos.
El gobierno porteño había presentado la semana pasada un plan para ampliar los espacios peatonales en todos los barrios para que quienes quisieran realizar salidas recreativas pudieran mantener la distancia social.
Desde la oposición reclamaron que mejoren los controles. "Es inadmisible que el Gobierno de la Ciudad no pueda ejercer el control de los protocolos que ellos mismos presentaron ante autoridades nacionales para lograr los permisos de apertura" dijo Claudia Neira, presidenta de la comisión de Espacio Público de la Legislatura porteña.
Neira apuntó a la población joven y reclamó que la Ciudad desarrolle protocolos específicos.
"Es necesario regular cómo deben llevarse a cabo las reuniones de hasta 10 personas. Hemos presentado toda una serie de iniciativas en ese sentido, incluso hemos pedido intervenciones para que los adolescentes se puedan reunir manteniendo todos los cuidados, pero desde la Ciudad aún no se ha puesto una mirada específica sobre cómo acompañar a los jóvenes en la salida paulatina del aislamiento y muchos de ellos terminan agolpados en las zonas de los bares", señaló.