"Odiadores seriales"
Alberto Fernández celebró el 204 aniversario de la independencia en la quinta de Olivos, rodeado de empresarios y sindicalistas y con los gobernadores conectados en teleconferencia.
En un mensaje que evocó los momentos históricos también volvió a pegarle a la oposición de Cambiemos, con la que esta semana se cruzó fuerte luego que lo implicaran en la muerte de Fabián Gutiérrez, ex secretario de Cristina Kirchner.
"Yo vine aquí a terminar con los odiadores seriales", se dirigió a sus adversarios. Vine aquí a abrir los brazos para que todos nos unamos en busca de ese destino común. No vengo a instar un discurso único, sé que hay diversidad y la propicio, de todo tipo, género e ideológica. La celebro, no me afecta, lo que necesito sí es que sea llevada adelante con responsabilidad".
"La primera responsabilidad es no mentir, decir la verdad y respetarnos. El primero que quiere eso es el Presidente y es otra vez el compromiso que asumo con ustedes", señaló Alberto y destacó "la unidad" entre el Gobierno y las provincias para enfrentar la pandemia de coronavirus.
"Todos estuvimos de acuerdo en que había que preservar la salud y la vida de la gente. Ninguna sociedad concreta su destino en el medio de insultos, divisiones y fundamentalmente teniendo al odio como común denominador.
Rescató que, en momentos en que "ponía en jaque" a la región, en el país "todos estuvimos de acuerdo en que había que preservar la vida de la gente, desde Jujuy a Tierra del Fuego, y desde Mendoza a la provincia de Buenas Aires".
El presidente defendió el aislamiento social y propició "mejorar el sistema de salud que estaba muy golpeado, para que ningún argentino se quede sin atención sanitaria. Todos actúan prontamente y nadie pregunta de qué partido viene, solo preguntamos cómo te ayudo, todos. Hay que pasar este momento siempre siendo solidarios. Ya estamos empezando a reconstruir la Argentina", sostuvo.
A su lado estaban, guardado la distancia social, estaban Miguel Acevedo y Carolina Castro, de la UIA; Héctor Daer, de la CGT; Adelmo Gabbi por la Bolsa de Comercio; Eduardo Euernekian, por la Cámara de Comercio y Servicios: Javer Bolsini, de la Asociación de Bancos argentinos; Néstor Szcech, de la Cámara Argentina de la Construcción; y Daniel Pellegrina, de la Sociedad Rural Argentina.
Los llamó a construir la "Argentina del mañana", sostuvo que "el odio y la división nos dejó en el lugar que nos quedamos, nos posterga y nos paraliza y nos pone en el peor lugar como seres humanos".
"Ya estamos trabajando con todos los que están aquí y en ese futuro los que trabajan tienen un rol central. Han hecho un enorme esfuerzo y lo valoro mucho lo que han hecho los hombres del sindicalismo por sobrellevar este presente", dijo y agradeció al sindicalismo por "haber entendido la fragilidad de este tiempo".
Indicó que "no es verdad que no tengamos futuro y menos cierto es que no tengamos ideas" y agregó: "Este presente no permitió ver las cosas en su real dimensión y ya tenemos mucho más claro por qué nos pasaron cosas y por qué no podemos volver a repetir errores que cometimos en el pasado".
Alberto había iniciado su exposición celebrando su comunión con los 24 gobernadores, "que están hoy junto a mí unidos y trabajando para enfrentar lo que nos toca vivir". Luego nombró y agradeció a cada uno. Al jefe de Gobierno porteño, Rodríguez Larreta, uno de los principales dirigentes de la oposición, lo distinguió con un "amigo Horacio", al mencionarlo.
Recordó, además, a la fallecida cantante popular Mercedes Sosa, cuya voz se escuchó al inicio del acto en las estrofas del Himno Nacional, y puso de relieve que "sufrió las desventuras de la Argentina. Era tucumana, del mismo lugar donde la patria gritó su independencia", remarcó. Anunció que "a partir de hoy radio Nacional Tucumán volverá a llamarse radio Mercedes Sosa".
El único gobernador que habló fue Juan Manzur, de Tucumán, donde en 1816 se proclamó la independencia, que celebró además con un video para recordar el acta de la Declaración de Independencia, leída por niños de todas las provincias. "Alberto recibió el país en terapia intensiva y lo agarró la pandemia. Nos sentimos orgullos y confiamos en nuestro Presidente", dijo el mandatario.