Cambiemos

Surgen más pruebas que vinculan a Macri con el espionaje a Larreta, Santilli y Vidal

Las revelaciones confirman el uso de la inteligencia ilegal para disciplinar a los aliados. El caso del senador radical Marino. Bullrich reconoce que hubo al menos 15 mil espiados.

 Las denuncias por espionaje ilegal durante el gobierno de Cambiemos explotaron en los últimos días y, entre varias cuestiones, dejaron en evidencia la existencia del uso de la inteligencia para disciplinar a los aliados políticos de Mauricio Macri.

María Eugenia Vidal, Horacio Rodríguez Larreta, Diego Santilli, Emilio Monzó, Mario Negri, Cristian Ritondo y Nicolas Massot son algunos de los dirigentes del entonces oficialismo que aparecen en las listas de presuntos espiados que investigan el juez federal Marcelo Martínez De Giorgi y el juez de Lomas de Zamora, Federico Villena. 

"Estoy convencido que ni Mauricio Macri ni su gobierno han tomado ninguna decisión política en esta dirección. Estoy convencido de que Macri no tiene nada que ver", trató de calmar las aguas Larreta.

Imputaron a Macri, Arribas y Majdalani por espionaje ilegal 

Estos casos se suman al escándalo por el espionaje a más de 400 trabajadores de prensa acreditados para la cumbre del G20 y otras decenas de personas vinculadas a la cumbre de la OMC. Al respecto, Patricia Bullrich reconoció que "van a salir 15 mil personas" que también fueron seguidas por la AFI. Entre ellas mencionó a "mozos, seguridad de edificios, los que proveían a los hoteles, todos los habitantes de Puerto Madero".

Este domingo, el periodista Rolando Graña reveló en su programa GPS una serie de audios del ex director de operaciones de la AFI, Alan Ruiz, en los que da detalles del seguimiento ilegal a opositores y también a oficialistas "rebeldes", además de organizaciones sociales.

Allí Ruiz admite la utilización de causas judiciales para realizar espionajes a dirigentes políticos o allegados, un mecanismo habitual del aparato de inteligencia. "Las operaciones que hacemos la hacemos con la cobertura judicial de algún juzgado", dice el ex funcionario, que también menciona que el sector Silvia Majdalani, ex número dos de la Agencia, no seguía ese procedimiento.

"La cosa fue así, el chabon (Mac Allister) llamó a una consultora para medirse como gobernador de La Pampa. Entre los resultados posibles parece que Marino era de los tipos que más medía del radicalismo y eso lo operaron los radicales. Ahí lo apuntan al Coti (Nosiglia). Lo operaron de ahí, lo hicieron mierda", cuenta Ruiz.

El ex jefe de la AFI, Gustavo Arribas, tenía vínculos con Mac Allister por la representación de su hijo futbolista. Marino también estaba cruzado con los jefes de la AFI porque los hizo ir al Congreso a explicar una denuncia por una presunta red de espionaje ilegal.