Un intendente de Cambiemos que se fue de viaje al exterior el fin de semana de elecciones y abona a la teoría Carrió
Diego León Barreto ganó en el 2015, impulsado por la ola Cambiemos, la municipalidad de Funes, una ciudad-jardín vecina a Rosario que creció como zona de recreación con chalets de fines de semana, amplios parques y arboledas exuberantes. Luego, se convirtió en un lugar privilegiado para el desarrollo de barrios privados y countries y la localidad triplicó sus habitantes permanentes.
Curiosamente, a pesar de la proliferación de estos barrios privados y de una población que en su mayoría se identificaba con el macrismo, León Barreto cayó derrotado en las elecciones provinciales de junio pasado por Roly Santacroce y el justicialismo volvía al poder después de 16 años.
Desde la semana pasada, la ciudad se convirtió en un infierno cuando los empleados municipales se pusieron en pie de guerra por falta de cobro y los proveedores en reclamo de facturas atrasadas. Desde la oposición denuncian que Barreto deja una deuda de 350 millones de pesos.
La temperatura aumentó más aún cuando advirtieron que el intendente había desaparecido del municipio durante toda la semana pasada y un vecino jura haberlo visto en el aeropuerto de Ezeiza el sábado previo a las PASO nacionales que corrió como reguero de pólvora por las redes sociales.
Sin embargo, la noticia recién la pudo confirmar LPO aunque sin poder precisar el destino que eligió para su escapada y se cree que pasó unos días en las playas del Caribe:
"Lilita tenía razón cuando dijo que muchos estaban vacacionando, en lo que le pifió fue que Diego no estaba esquiando ni disfrutando del verano europeo" ironizó un funcionario municipal a LPO en referencia a los dichos de Carrió en el CCK donde afirmó que en octubre iban a cambiar los votos porque "muchos amigos nuestros" estaban de viaje de placer.
Luego que este medio contactara a varios funcionarios de primera línea, donde algunos afirmaron que el mandatario se encontraba en Buenos Aires mientras otros aseguraron que estaba en la misma ciudad de Funes, La Política Online pudo hablar con Diego León Barreto en una nota exclusiva donde confirmó el viaje:
"¿Cuál es el problema si estuve un día o dos en una playa? Como intendente, dentro de los derechos que me da la ley y siempre respetando la Constitución, puedo tomarme cinco días hábiles -sin notificar al Concejo- y tuve una semana complicada con problemas personales, mi señora está embarazada y uno también puede viajar por temas de salud. No entiendo cuál es la gravedad si estuve permanentemente en contacto con mi equipo solucionando los problemas que tenemos" se justificó.
Para Barreto hay una intencionalidad política y una campaña de desprestigio hacia su persona y un intento de desestabilización de lo que queda de su mandato: "Es de cobarde patear a alguien que está en el piso pero nosotros estamos de pie más fuerte que nunca más allá de los rumores sobre los días que estoy o no estoy porque siempre actué dentro de lo que puede el intendente".
Además aclaró que no piensa renunciar: "vamos a asumir la responsabilidad hasta el 10 de diciembre porque no renuncié a pesar de que también corrió ese rumor sino que voy a tratar de solucionar esta situación hasta el último segundo y trabajar en conjunto con intendente electo para que esta ciudad esté mejor".
Por otra parte, León Barreto reconoció a este portal que desde que asumió, en diciembre de 2015, esperaba un acompañamiento mayor del gobierno nacional: "la ciudad necesita otro tipo de acompañamiento y también partidariamente nos hubiese venido más que bien. Por ejemplo, las obras de avenida Illia se retomaron seis meses antes de las PASO y era una obra que esperé durante tres años. Quizá el resultado de las elecciones hubiese sido distinto. Algunos funcionarios se olvidaron" disparó el intendente.
"De todas maneras, durante mi gestión 1.500 familias pudieron tener cloacas y hay más de 5 mil vecinos que no se inundan más pero hubieron otras necesidades que no pudimos atender y que la ciudadanía priorizó y no nos acompañó con el voto" sostuvo el mandatario insistiendo en los argumentos que suele utilizar Mauricio Macri para defender su gobierno.
En cuanto a la situación económica del municipio es más que crítica y según la oposición (y algunos funcionarios al tanto de las cuentas), deja una deuda de 350 millones de pesos con problemas con proveedores en áreas sensibles como la recolección de residuos, reparación de vehículos de los bomberos voluntarios o seis meses de sueldo de los concejales, además de una deuda millonaria con la ART que suspendió la cobertura y los trabajadores se encuentran sin protección.
Respecto a los sueldos, Barreto asegura que si bien hubo atrasos en el pago de liquidaciones y aguinaldo de junio, el mes de julio está casi todo abonado "falta nada más que el 12 por ciento. Sabemos que hay problemas pero estamos trabajando para resolverlos".
En diálogo con La Política Online, el intendente electo, Roly Santacroce prefirió no opinar sobre el viaje del actual mandatario aunque admitió que la situación que recibirá el 10 de diciembre es muy compleja:
"Se debe 350 millones de pesos y no hay plata para pagar los sueldos. Además se le debe 15 millones de pesos a la ART. Hoy hay 1100 empleados municipales en una ciudad que es para 500. Han habido un montón de designaciones nuevas de cargos políticos" apuntó Santacroce.
"Desde el 2009 se autorizaron 10 emprendimientos para barrios privados por un total de 22 millones de metros cuadrados que se cotizan una barbaridad y lo único que dejaron a la ciudad fue una rotonda para que ellos puedan ingresar a sus barrios. Esto viene arrastrándose de hace muchos años" evaluó preocupado.