Elecciones 2019

Macri eludió el Monumento a la Bandera y criticó a Moyano en un club de barrio

El presidente visitó Rosario, pero no hubo acto oficial. Sorprendió al cuestionar a Moyano ante los alumnos que lo escuchaban en el club Ciclón.

En el Día de la Bandera, Rosario se convirtió en la arena donde se disputa la previa a las presidenciales. A la tarde, Cristina presentará el libro Sinceramente en los salones Metropolitano mientras que Mauricio Macri prefirió visitar un club de zona sur y dar un discurso electoral mientras que el socialismo, golpeado por los resultados, participó del izamiento de la bandera en el Monumento.

Sin participar del acto oficial, que solamente consistió en el izamiento de la Bandera con presencia de la intendenta Mónica Fein y del gobernador Miguel Lifschitz y sin discursos de los todavía mandatarios, Mauricio Macri prefirió una actividad de campaña y visitó el club Ciclón, una humilde institución del barrio Tablada.

Ante alumnos de primaria de distintas escuelas de la zona, Macri apenas habló de la bandera de manera tangencial y no nombró a su creador, Manuel Belgrano, a quien se lo homenajea el 20 de junio, día de su fallecimiento.

En cambio, aprovechó para hablarles a los niños de la corrupción y la mafia "que todo lo que toca lo destruye" y pegarle a los Moyano por los altos costos del transporte de carga, un discurso en clave electoral ante la mirada asombrada de la intendenta socialista.

Acompañaron al presidente la ministra de seguridad Patricia Bullrich, el radical José Corral y el presidente del PRO en Santa Fe, Federico Angelini, en la previa al cierre de listas que promete será áspero en Cambiemos. El dato de color es que Roy López Molina, quien salió tercero en carrera a la intendencia, no se acercó.

Luego de los diez minutos que duró la ceremonia, Macri se retiró del predio donde en las afuera los vecinos se pelearon entre los que apoyaban a Cambiemos y quienes se acercaron para manifestar sus críticas al gobierno nacional.

Anteriormente, a primera hora de la mañana, el gobernador Lifschitz y la intendenta Fein habían asistido al izamiento de la bandera en el Monumento Nacional. Otro acto exprés donde no hubo discurso de ninguno de los altos funcionarios: "Para no politizar el Día de la Bandera", justificó el gobernador socialista.

La ausencia de un acto como los que tradicionalmente se organizaban para la ocasión, con desfiles y homenajes a los ex combatientes de Malvinas generó malestar en la ciudad. La indignación fue tal que precisamente un ex soldado que participó del conflicto bélico con Inglaterra improvisó un discurso a viva voz con críticas a los políticos.

En el mismo sentido se expresó el arzobispo de Rosario, monseñor Martín, quien reconoció que "uno hubiese deseado un acto de mayor envergadura" para luego apuntar duro contra los funcionarios: "A la dirigencia le falta madurar".

Como broche de una jornada por demás de extraña para la ciudad, Cristina Kirchner presentará su libro Sinceramente en los salones Metropolitano adonde movilizarán los gremios y partidos políticos. Se espera que de las conversaciones que haya entre bastidores pueda haber definiciones sobre la conformación de la lista a diputados nacionales del Frente Todos.