Nisman: murió el perito que defendió la hipótesis de asesinato
El médico forense Osvaldo Raffo fue hallado muerto de un balazo en la cabeza en la bañera de su casa en el barrio de San Martín. El legista, que estaba muy enfermo, había intervenido en la causa de Alberto Nisman y consideró que el ex fiscal había sido asesinado.
El caso de Raffo parece tener menos misterio. El médico dejó dos notas escritas en la escena del crimen y, una dirigida a su empleada, a quién le pidió que "No subiera sola" al lugar donde se encontraba el cuerpo.
La misiva está destinada al magistrado que reciba la causa y tiene fecha del 17 de marzo a las 8.35 hs. "No soporto más los dolores que me aquejan. No se culpe a nadie de mi muerte. Dios me perdone", reza el texto.
Raffo es el médico legista más prestigioso del país y realizó cerca de 20 mil autopsias e intervino en los casos más renombrados de la Argentina, como el María Soledad Morales o el de María Marta García Belsunce.
"La pistola Bersa modelo 62 calibre 22 presenta signos de haber sido disparada y la pericia indica irrefutablemente que fue el arma usada en el hecho", decía la pericia de Raffo sobre el cuerpo de Bisman que contradijo la autopsia oficial.
"El análisis del lugar del hecho, así como de las evidencias físicas del ‘escenario de esta Muerte Violenta, descartan la posibilidad que el hecho sea accidental. Por los mismos motivos expuestos se descarta la probabilidad de la hipótesis en modalidad suicida", escribió sobre la autopsia, donde participó por expreso pedido de la querella que encabezaba Sandra Arroyo Salgado.
La autopsia oficial establecía que la muerte se produjo cerca del mediodía del domingo 18 de enero de 2015. Sin embargo, el informe de Raffo declaraba que había sido a las 20hs del sábado 16 de enero (con un margen de cuatro horas).