Podemos ahora pone en duda su respaldo al presupuesto y agrava el aislamiento de Sánchez
Luego de exceder en más de tres meses el plazo establecido por la ley, el Consejo de Ministros del Gobierno de España finalmente aprobó este viernes el proyecto final de Presupuestos Generales del Estado para el 2019.
Sin embargo, la decisión del socialismo pasó más por la excesiva demora que está requiriendo la aprobación de la ley de leyes -que como mínimo dejará sin presupuesto al primer trimestre del año- que por un verdadero consenso alcanzado.
De hecho, las tensiones con las restantes fuerzas políticas no sólo no se han solucionado, sino que se extendieron hacia sus propios aliados. Al día de hoy, incluso el izquierdista Podemos pone en duda su respaldo, ya que denuncia un incumplimiento en el pacto alcanzado entre Pedro Sanchez y Pablo Iglesias.
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En rigor, los violetas enumeran 11 medidas que no están contempladas en el proyecto final -que el socialismo promete apoyar en leyes paralelas posteriormente-, entre las que se destacan la limitación de los precios del alquiler y de los valores de las tarifas de electricidad, un problema gravísimo en España.
En el otro extremo, se encuentran los sectores más conservadores del arco político español como el Partido Popular y Ciudadanos, que advierten por el "irresponsable" incremento del déficit fiscal originado en el aumento del gasto social.
Es que el objetivo del socialismo es "blindar el estado de bienestar", aumentando las partidas sociales en un 59% en el caso de los gastos para la dependencia, un 41% en ayudas a la vivienda y un 40% en políticas de infraestructura.
Además, incrementa el Salario Mínimo a 900 euros, recupera el subsidio a los desocupados mayores a los 52 años y sube las partidas para "combatir la pobreza" y contra la violencia de género en 321 millones de euros y 220 millones, respectivamente.
El gobierno de Pedro Sánchez podría caer porque no le votan el presupuesto
Por el momento, aunque tampoco fue confirmado oficialmente, el único respaldo con el que cuenta el oficialismo es el de los grupos independentistas catalanes, región a la cual subió el porcentaje de inversión del Estado del 13% al 18% como estaban reclamando.
De todas maneras, pocos son los que creen que la iniciativa superará el escolló del Senado, donde el PP cuenta con mayoría absoluta. Así, Sánchez quedaría en una posición de extrema debilidad, donde debería gobernar por decreto o adelantar la convocatoria a elecciones.